“Hoy tengo el estado físico y el aire que se requiere. Si voy al ataque tengo que ir como fui. Si tengo la voluntad de llegar al área rival, también tengo que volver para defender en la mía. Mi físico por ahora me lo permite. No lo hago siempre, sólo en jugadas que pueden ser claras. Quizás a veces me equivoco porque voy de más. Es algo que fui mejorando”, explicó Zuculini, en diálogo con ESPN, satisfecho con su preparación.
Más allá del gol, Zuculini se quedó con una espina clavada: el tanto que falló minutos después. “Me erré otro gol muy claro y me voy a quedar toda la noche con ese”, se lamentó, aunque valoró la confianza que le dio Gustavo Costas al dejarlo en cancha durante todo el segundo tiempo del amistoso.
El volante también se refirió a la situación de Maximiliano Salas, uno de los jugadores con futuro incierto en el mercado de pases. Tras compartir un emotivo abrazo con él en la celebración del gol, Zuculini aclaró: “Tiene la camiseta de Racing, hizo toda la pretemporada con nosotros. Ahora lo voy a ver adentro del vestuario porque es una gran persona que conocí hace un año y medio y me ayudó a cumplir el sueño de toda mi vida que era salir campeón con Racing. Será un problema de los dirigentes, algo que ellos tendrán que resolver, nosotros nos seguimos preparando porque tenemos una final el miércoles”.
El regreso de Zuculini representa una noticia positiva para Racing. No sólo por lo que aporta desde lo futbolístico, sino también por la entrega y el compromiso que transmite fuera de la cancha. Su decisión de renunciar al descanso para enfocarse en su recuperación fue un gesto que el cuerpo técnico y sus compañeros valoraron. La entrega de Zuculini ya comenzó a dar resultados y promete ser clave en lo que se viene.