Economía del Conocimiento: cuál es el alcance de la medida
El programa tiene como meta promover la conformación y consolidación de grupos de empresas públicas y privadas dedicadas a la producción de bienes y servicios de la Economía del Conocimiento con un criterio federal, para potenciar el desarrollo de las economías regionales.
Pueden participar provincias y municipios (u organismos o empresas estatales, provinciales y municipales), así como personas jurídicas sin fines de lucro del sector privado que agrupan empresas dedicadas a producción de bienes y servicios basados en las actividades promovidas por la Ley de Economía del Conocimiento, y tengan entre sus fines la promoción del desarrollo económico, innovación productiva, asociatividad empresarial o vinculación tecnológica.
Los proyectos se evaluarán, entre otros aspectos, según la contribución al desarrollo económico regional, que incluyan empresas inscriptas en el Régimen de Promoción de la Economía del Conocimiento, y ponderando los que tengan empresas lideradas por mujeres.
Un camino recorrido
En la primera convocatoria, de 2021, el Ministerio de Desarrollo Productivo destinó $950 millones para acompañar el desarrollo de 65 nodos, los cuales recibieron un máximo de $20 millones en ANR por proyecto; mientras que en esta segunda se duplica esa cifra hasta $40 millones.
La subsecretaria de Economía del Conocimiento, María Apólito, indicó que "con este programa se atienden problemáticas sectoriales y se remueven obstáculos estructurales para que las empresas de economía del conocimiento puedan crecer, innovar, sumar trabajadores y ganar nuevos mercados".
Además, la funcionaria expresó que "las actividades de esta industria están creciendo en todo el país generando miles de empleos de calidad y contribuyendo a mejorar la competitividad y las capacidades productivas en todas las regiones".
"Estamos apoyando proyectos en cada una de las provincias, no sólo para empresas de base tecnológica sino también para industrias tradicionales, como agro-alimentos o textiles, que pueden generar productos innovativos mediante la biotecnología y nanotecnología, y recibir los beneficios impositivos que da la Ley de Economía del Conocimiento", subrayó Apólito.