Alberto Fernández habló de "tierras improductivas" y abrió otro foco de conflicto con el agro.
La semana que termina fue una de las más accidentadas de Alberto Fernández en materia declarativa. Tras la polémica por el uso peyorativo del término “agrotóxicos” y las críticas por sus dichos sobre México y Brasil, el Presidente habló en un acto en la ciudad bonaerense de Mercedes y sostuvo que “no tiene sentido tener tierras improductivas cuando alguien está necesitando un terreno”. Por eso, Federación Agraria Argentina (FAA) salió al cruce y habló de “los terratenientes de la política”.
“Venimos sosteniendo que hay que debatir la tierra pensando en ¿para qué, para quienes, para cuántos? Queremos recordarle al señor Presidente que los agricultores y ganaderos que laboramos la tierra no la tenemos para especular. La tenemos y la queremos, porque muchos no pueden acceder a ella, para trabajar”, remarcó el comunicado de la entidad, al que titularon “Tierras: El Presidente habla sin saber y no cumple con lo que debe hacer”.
Y especificaron: “Cabe señalar que han desaparecido 81.000 chacareros en los últimos 16 años. Y eso no son fríos números”.
Por eso, uno de los ejes en los que pusieron el foco desde Federación Agraria es en manos de quién están tales “tierras improductivas”.
“Se fomenta la concentración económica en grandes grupos que no son agricultores. Son especuladores en general, muchos devenidos “terratenientes” desde la política. Por eso discutimos ¿quiénes queremos trabajar la tierra?, ¿para qué? ¿cuántos?”, se preguntaron los dirigentes agropecuarios.
Uno de los puntos centrales del mensaje de la entidad presidida por Carlos Achetoni está en las tierras improductivas, pero que son propiedad del Estado.
“También queremos recordarle al señor Presidente que está vigente la Ley 27.118 de Reparación Histórica de la Agricultura Familiar para la Construcción de una Nueva Ruralidad en la Argentina, que contempla un Banco de Tierras Fiscales (del Ejercito, ferrocarriles y otros), que nunca ha sido reglamentada. Por eso, a tantos años de su sanción, sigue siendo inaplicable”, recordaron desde la Federación Agraria.
Incluso precisaron con las palabras que el propio Alberto Fernández había hecho al respecto. “El 8 de septiembre pasado, en Olivos, el Presidente Fernández anunció que reglamentaría esa Ley tan ansiada por tantos argentinos. Hoy, nueve meses después, nada se ha cumplido. Ni siquiera está hecho el primer paso del relevamiento de tierras fiscales disponibles”, manifestaron.
"Repudio totalmente las declaraciones por livianas y poco claras, pues cuestionan un derecho constitucional consagrado en un modelo de país republicano, federal y democrático. El problema habitacional argentino no tiene nada que ver con falta de espacio para construir viviendas dignas, sino con la falta de decisión política de hacer bien las cosas. Estos dichos de manera desordenada, confusa, sin fundamentos, no hace más que generar incertidumbre jurídica entre quienes tienen propiedades”, criticó Achetoni.
Durante el acto realizado en la ciudad bonaerense de Mercedes este miércoles, en el cual se presentó un lote de tierras que serán destinadas a la construcción de viviendas, Alberto Fernández había dicho: “me alegra muchísimo saber que esto ocurre trabajando junto el Estado y los dueños de la propiedad privada y con seres humanos, ciudadanos que tienen esta tierra y que este proyecto lo emprenden junto al Estado. Hace falta el esfuerzo de los dos”.
Y allí fue cuando lanzó la frase que luego generó un marcado repudio desde sectores productivos, pero también desde el arco político.
“No tiene sentido tener tierras improductivas cuando alguien está necesitando un terreno. Y que no tiene sentido guardarlo para que un día ‘mi hijo lo herede’. Y que tiene mucho más sentido volverla productiva hoy y que en ese lugar alguien construya el techo donde van a crecer sus hijos. Y ese sentido solidario es lo que más queremos rescatar en este tiempo en Argentina”, expresó Alberto Fernández.
Y concluyó su mensaje con dardos hacia la gestión de Mauricio Macri. “El Estado debe ponerse del lado del más débil para darle la fuerza que necesita. Alguien creyó que esto se arreglaba con créditos y muchos argentinos accedieron a ese crédito UVA. Y accedieron a una casa, y a un montón de problemas, que tratamos de resolver y estamos resolviendo. Pero ese no es el camino, porque estas cosas no se deciden solo por la voluntad de los mercados”, sostuvo.
