La dirigencia del fútbol está urgida por un número que pide prioridad respecto de los futbolistas, y son los 16.000 empleados que trabajan en los clubes de manera estable.
En el marco de una negociación con el gobierno, los clubes buscan reinvindicar el famoso decreto 1212 para moderar las retenciones previsionales e impositivas y no quedar tan ahogados financieramente. En contrapartida, los dirigentes ofrecerán poner rápidamente en marcha la máquina. Tras la salida de la cuarentena obligatoria, volverán los entrenamientos en tandas y en turnos para pensar en volver a jugar sin público.
Es posible que se recomiende que no haya asistencia en los estadios durante un período prolongado.
Pero podría volver el fútbol a mediados de mayo (con la televisación de algunos partidos por TV abierta), para que la crisis se sienta menos. Y ese hecho cultural que representa el fútbol en nuestro país, volverá antes de lo pensado a aparecer en escena para despertar nuevamente la atención.