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Sin saludos para Stornelli ni cruzarse con Bonadio, Cristina puso en marcha su estrategia en la causa de los cuadernos: disparar contra Macri

Patricia Blanco
por Patricia Blanco |
Sin saludos para Stornelli ni cruzarse con Bonadio, Cristina puso en marcha su estrategia en la causa de los cuadernos: disparar contra Macri

Cristina Kirchner enfrentó hoy una vez más a su principal enemigo en la Argentina: Claudio Bonadio, el juez que dictó su primer procesamiento, que ordenó su primera orden de detención y el que –ella lo sabe- también la procesará por la causa de los “Cuadernos K”. Pero esta vez el enfrentamiento fue tácito: ya no hizo falta cruzarse. Ninguno quería ver al otro.

Lucía un tailller marrón con rayas cruzadas y una polera. Un detalle al pasar: según lo demuestran las fotos, la expresidenta había elegido la misma ropa cuando enfrentó la indagatoria por la causa del Memorándum con Irán. También en esa oportunidad, en octubre de 2017, se había presentado con Bonadio.

Otros observadores, también notaron que llevaba una cartera Gucci, al tono, que no baja de los 2.500 dólares.

Sexta visita a Py, cuarta al despacho de Bonadio. Es la cuarta vez que la cita Bonadio al cuarto piso de Comodoro Py: el juez la hizo inaugurar la lluvia de indagatorias con la causa dólar futuro, aunque después la llamaría por los expedientes Los Sauces y el Pacto con Irán, que denunció el fiscal Alberto Nisman antes de morir. Además, Cristina está procesada por la concesión de obra pública a Lázaro Báez y por el caso Hotesur.

Paso a paso, los detalles de la indagatoria. Bonadio llegó minutos después de las 9.15 y entró por la misma puerta que usaría un rato después la senadora. Cristina llegó 9.35, pero entró 10.15 en la secretaría del juzgado.

Stornelli, en cambio, entró a las 9.52 por la escalinata principal. Para las 10.20, el fiscal hacía su ingreso al cuarto piso, en medio de un fuerte control de seguridad que impedía el paso a todo ajeno al juzgado.

No hubo saludos: la expresidenta eligió ignorar al fiscal Carlos Stornelli, al que veía por primera vez. Bonadio ni siquiera fue, según se explicó, porque sabía que la senadora no hablaría.

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Cuál es la estrategia de la expresidenta. Apenas unos minutos después, Cristina –o su equipo- lanzó por redes sociales lo que fue su jugada en el caso, con tres escritos en donde:

  • Denunció una “persecución judicial” que viene sufriendo desde el 10 de diciembre de 2015, fue impulsada por el Gobierno de Mauricio Macri con el apoyo de los medios de comunicación “hegemónicos”, siempre según ella.
  • Dijo que se busca “judicializar hechos de la política económica”, pero -para que “sea eficaz”- añaden maniobras de lavado, enriquecimiento y corrupción.  Ahí disparó contra Mauricio Macri, “hijo de Franco, primo de Angelo Calcaterra y hermano del alma de Nicolás Caputo", todos ellos “la quinta esencia de la patria contratista”. De paso, pidió que el expediente de los cuadernos pase a la órbita del Julián Ercolini, en el marco de la causa de asociación ilícita.
  • Pidió la nulidad de la causa, tras denunciar un “trato preferencial” para Calcaterra y su CEO, Javier Sánchez Caballero, luego de una reunión que habría existido entre el primo de Macri y el presidente de Boca, Daniel Angelici y el fiscal Stornelli; el encuentro se habría desarrollado en la quinta de Olivos, con la presencia del propio Presidente.
  • Pidió citar como testigos al jefe de Estado, a Angelici y al propio remisero Oscar Centeno, además de las filmaciones de la residencia de Olivos, Balcarce 50 y la AFI. ¿El período? desde el 8 de enero: el momento en que el periodista de La Nación recibió los cuadernos, hasta ahora.
  • La recusación contra Bonadio y al fiscal. Habla de fórum shopping, prejuzgamiento, de las distintas causas que instruyó Bonadio y de las denuncias que radicó la ex presidenta en el Consejo de la Magistratura

Con su propia lapicera, firmó el acta. Para las 11.15, Cristina Kirchner ya había abandonado los tribunales de Comodoro Py 2002, mientras Bonadio y Stornelli seguían avanzando con la investigación y a la espera de más revelaciones y arrepentidos.