El presidente Biden declaró los alrededores de Los Ángeles como zona de desastre, lo que permite partidas adicionales de ayuda. Hay 5 muertos y más de 100.000 evacuados en la ciudad considerada como la meca del cine y el hogar de las estrellas del jet set.
Mas de 100.000 evacuados y 5 muertos ante el avance incontrolable del fuego en la zona de Los Ángeles. (Foto: Gentileza Bloomberg)
El fuego no para en su voracidad en Los Ángeles. Avanza gracias a dos factores críticos: no llueve, y además se alimenta con vientos de mas de 100 kilómetros por hora. Se llama "el viento de Santa Ana" y es el que ayuda a que los incendios se propaguen sin que puedan ser controlados hasta el momento.
El presidente Joe Biden declaró al lugar como una "zona de catástrofe" para poder disponer de una rápida ayuda. Pacific Palisades, un rico vecindario entre las montañas de Santa Mónica y el Océano Pacífico, es el lugar más afectado con enormes mansiones que fueron arrasadas por el fuego.
El viento, además, ha hecho que los focos incendiarios han "sitiado" a la ciudad de Los Ángeles. Hay al menos 5 muertos y más de 100.000 evacuados. Hasta el Paseo de la Fama en Hollywood, símbolo del séptimo arte, se encuentra amenazado por el avance de los incendios.
La falta de lluvias y los fuertes vientos han provocado al menos 4 focos incendiarios de gran extensión en torno a Los Ángeles. La ciudad está en alerta máxima ante el peligro de masivas evacuaciones. El fuego se espande al norte, al noreste,noroeste y suroeste de la ciudad. Ya destruyó miles de casa en la exclusiva zona de Malibú. Entre casas comunes y las mansiones de los famosos, son más de dos mil los inmuebles consumidos por el fuego.
Como no llueve, este invierno en California se dio con una época de "seca", los fuertes vientos han diseminado las llamas por todos los sectores que rodean a la meca del cine. Incluso el monte sobre donde se encuentran las célebres letras que forman la palabra "Hollywood" están a punto de desaparecer, engullidas por el fuego.
Y las evacuaciones no son ya solo en Santa Mónica o Malibú. La propia ciudad de Los Ángeles comienza a tener las lenguas de fuego muy cerca de las casas. Un panorama atemorizador para los californianos que ven como un ícono del séptimo arte se ve comprometido por la acción del fuego y el "viento de Santa Ana".
Es una visita obligada para cualquier turista. No estuvo en Los Ángeles si no caminó por Hollywood Boulevard, desde el teatro Chino en donde comienza el "Walk of Fame".
Es el mítico paseo que inmortaliza desde el siglo pasado a todas las máximas figuras del mundo del entretenimiento. Una estrella destaca su nombre, con un ícono específico según haya sido un actor de teatro, de películas o músico por ejemplo. Se los presenta en una ceremonia en el que colocan sus manos y sus pies en un baldosa de cemento blando para que quede para siempre al endurecerse.
Pero ese patrimonio de la ciudad y de la cultura universal está ahora en peligro. Los visitantes ya no miran hacia el piso, leyendo el nombre de los artistas mientras buscan a sus favoritos. Ahora, contemplan azorados como el fuego está sobre ellos, a unos cientos de metros sobre las colinas de la ciudad.
Si no llueve pronto, el esfuerzo de aviones hidrantes, bomberos y voluntarios puede ser inútil. ¿Seguirá el Paseo de la Fama el mismo camino que miles de casas en torno a Los Ángeles?
La emergencia comenzó con las primeras llamas el martes por la mañana en Pacific Palisades, el rico vecindario entre las montañas de Santa Mónica y el Océano Pacífico. La falta de lluvias y el potente viento de "Santa Ana" transformaron todo en una zona de catástrofe.
Las lenguas de fuego se dispersaron por varias zonas y han rodeado a la ciudad. Los vientos de "Santa Ana" tienen una particularidad: eliminan la humedad de la forestación. Esto, combinado con la "seca" que vive California, multiplicó la capacidad del fuego para expandirse.
Se espera con gran nerviosismo que desde este jueves, la intensidad de los vientos disminuya. Aunque como persisten las fuertes ráfagas, si no llueve, la propagación del fuego se vuelve imprevisible.
A tal punto que el símbolo de Hollywood, el paseo de las estrellas, también se encuentra amenazado.