Medio ambiente

¿Qué es y por qué quieren cerrar la puerta del infierno?

Así lo decidió el presidente de Turkmenistán, que tiene un cráter que emana fuego desde hace 50 años de manera permanente. Ahora, es un recurso turístico
El cráter de Darvaza

El cráter de Darvaza, la puerta del infierno que arde desde 1971, en Turkmenistán. El presidente ahora la quiere cerrar ( Foto: Archivo)

Parece la entrada al centro de la tierra, salida de la aventura imaginada por Julio Verne. Ubicada a 240 kilómetros Ashgabat, capital de Turkmenistán, en el desierto de Karakum se encuentra la "puerta del infierno". Un cráter en medio de la nada, que desde hace 50 años, mantiene ardientes fuegos de distinta intensidad de manera permanente.

Ahora, el gobierno turkmeno, quiere sellar la puerta al averno.

Las razones son una mezcla de sentido común, oportunismo y también de estrategia económica. Pero el presidente Gurbanguly Berdymujamedov tomó la decisión de cerrarlo como sea.

La puerta del infierno

A lo largo de las décadas, diferentes investigadores, geólogos en su mayoría, llegaron hasta ese cráter para comprender su origen. Tropezaron con un primer problema casi insalvable. Todos coinciden que el cráter se inició durante una exploración petrolera y gasífera de la entonces Unión Soviética en una de sus republicas: Turkmenistán.

La fecha: 1965 a 1971. En esos años comenzó esa prospección sobre el suelo. Pero claro, en plena guerra fría y en un desierto controlado por los soviéticos, acceder a cualquier información era prácticamente imposible. Hay imágenes en blanco y negro de obreros trabajando montando pozos petroleros y torres de gas, pero apenas eso.

origen de darvaza.jpg
Una de las pocas imágenes de los soviéticos realizando prospecciones de gas y petróleo en Darvaza (Foto: Archivo)

Una de las pocas imágenes de los soviéticos realizando prospecciones de gas y petróleo en Darvaza (Foto: Archivo)

Lo que no está claro es el origen de la "puerta del Infierno". La versión más repetida es que en un momento, cuando el pozo de un enorme diámetro estaba completo, se produjo una explosión en el centro. Dé las entrañas de ese pozo comenzó a brotar gas, que inmediatamente se prendió fuego.

Allí surge la primera discrepancia. El fuego fue fruto de una explosión o se lo prendió deliberadamente para "ventear" el gas liberado a la atmósfera.

Lo cierto que así nació este "accidente geográfico" aunque no se lo pueda catalogar como "accidente natural".

Su fuego, que oscila en pequeñas llamas a lo largo del cráter o momentos de mayor concentración, está activo desde 1971. Ya pasaron más de 50 años.

Desde entonces hay constantes expediciones. Como la del geólogo canadiense George Kourounis.

aerea noche.jpg
Una vista increíble del Cráter de Darvaza. De noche, con el fuego como iluminación ensoñadora (Foto: Archivo)

Una vista increíble del Cráter de Darvaza. De noche, con el fuego como iluminación ensoñadora (Foto: Archivo)

"Un coliseo de Fuego"

Patrocinado por la National Geographic, en 2013 descendió al centro del cráter. Protegido con un traje antiflama que lo asemejaba a un astronauta. Cuando estuvo en la base del cráter entre llamas de fuego aleatorias dijo: "hay miles de pequeñas bolas de fuego, y al lado de esta impresionante imagen, escuchas el sonido de un motor a reacción, este ruido es el sonido de gas ardiendo a alta presión".

Pero tampoco él, pese a tener el respaldo de National Geographic logró una explicación definitiva para este suceso

La etapa del turismo

Con la caída del muro de Berlín en 1989, Turkmenistán logró su independencia de la URSS. Mientras tanto, el cráter de Darvaza siguió ardiendo. Pero sin provecho alguno. Hasta que alguien vio el gancho turístico al asunto. Se organizaron expediciones hasta el borde de la cima del cráter. Hasta se armó un pasillo bien delimitado para llegar has donde el fuego comienza. Pero por diferentes razones, Turkmenistán no es un centro turístico mundial y la puerta del infierno sufrió por ello. Promedia apenas 6.000 turistas por año. Nada.

George Kourounis en el crater.jpg
En 2013, el explorador canadiense de National Geographic, George Kourounis, se convirtió en el primer ser humano conocido en entrar al pozo. (Foto: National Geographic)

En 2013, el explorador canadiense de National Geographic, George Kourounis, se convirtió en el primer ser humano conocido en entrar al pozo. (Foto: National Geographic)

Tapen ese cráter

En el comienzo de este 2021, el presidente Berdymujamedov se cansó. Dio la orden de apagar el fuego definitivamente. Primero por las consecuencias que puede tener sobre el calentamiento global, por mínimas que sean. Será, finalmente, una fuente menos de emisiones de dióxido de carbono.

Aunque la razón bien puede ser lo contrarió. "Turkmenistán será un proveedor de energía al mundo gracias a sus recursos", dijo el presidente. Ventear gas que no se usa, no le sirve al país.

Hay que cerrar el pozo y esta vez, hacer bien las obras para aprovechar el recurso natural.

aerea 1.jpg
La puerta del infierno, vista desde un Drone (Foto: Archivo)

La puerta del infierno, vista desde un Drone (Foto: Archivo)

El cráter de Darvaza es muy grande. Es un pozo de 69 metros de diámetro, 30 metros de profundidad y una temperatura en su interior de 400 ° Celsius. (aunque no en todos lados, porque si no, Kourounis sería solo un recuerdo.

De noche, brinda un espectáculo incomparable. Pero no produce dividendos. Y ahora, llegó el momento de revertir esa situación

La puerta del infierno se cerrará próximamente. Ya no evocará a Julio Verne. Nos acercará, tristemente, al efecto invernadero.

Embed
Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida por A24com (@a24noticias)

Se habló de