Los gravámenes se adaptarían a cada socio comercial de EEUU y tendrían en cuenta factores como el impuesto sobre el valor añadido (IVA).
Los nuevos aranceles no entrarán en vigor de inmediato, sino en un plazo de “semanas” o “meses”, y los primeros en ser castigados serán aquellos con un mayor déficit comercial con Estados Unidos, según explicó un alto funcionario antes de la rubrica del documento.
“Todo el mundo se ha aprovechado de EEUU y hemos pagado un precio alto por ello. Estados Unidos ha ayudado a muchos países a lo largo de los años con un gran costo financiero. Ahora es el momento de que esos países recuerden lo que hemos hecho por ellos y nos traten de manera justa”, dijo Trump.
Argentina en déficit con Estados Unidos
"Tenemos déficit con Gran Bretaña, también con la Argentina", dijo Donald Trump cuando le preguntaron sobre los aranceles, a las importaciones de acero y el aluminio hacia los Estados Unidos. La decisión que firmó el pasado lunes no hizo ninguna excepción con ningún país.
Ahora, mencionó que con Australia podría revisar el caso, pero ratificó que se mantendrán los aranceles para la Argentina, como con el resto del mundo, por una cuestión desfavorable de la balanza comercial.
En 2024, el comercio entre Argentina y Estados Unidos se caracterizó por un superávit comercial para nuestro país.
- En el primer semestre de 2024, las exportaciones a Estados Unidos crecieron 14% interanual, llegó a los US$ 611 millones.
- En el primer semestre de 2024, las importaciones desde Estados Unidos disminuyeron 27,7% interanual.
- En el primer semestre de 2024, el saldo comercial fue superavitario en US$ 10.708 millones.
La Argentina tenía un trato particular desde el primer gobierno de Trump firmado con Mauricio Macri, pero que la Argentina tenga un saldo superavitario, esa excepción quedó sin efecto.
Trump: "Tenemos déficit con la Argentina"
La Argentina cerró el año anterior con un superávit de unos US$ 229 millones, pero el 2024 revirtió históricamente hubo déficit. Las tarifas del 25% afectarán exportaciones que en el rubro del acero y el aluminio representan más de USD 600 millones anuales.
Como se ha hecho una costumbre, Donald Trump dialoga con asesores y algún periodista en el salón oval mientras firma sus órdenes ejecutivas o decretos.
Mientras usaba el ya "clásico" fibrón negro - el que utiliza todos los días para dejar su firma, se le preguntó por los aranceles. Dijo que se aplican con todos los países que EE.UU. tiene un saldo negativo en el comercio.
Comenzó con Gran Bretaña y luego siguió con la Argentina. Trump hizo una salvedad: el caso australiano. Como Australia está comprometido con la compra de aviones norteamericanos, el presidente señaló que revisará si los aranceles sobre el acero y el aluminio se aplicarán sobre ese país.
En cambio, nada dijo sobre que esta medida elimina lo que él mismo dispuso para con la Argentina en su primer gobierno. "Tenemos un poco de déficit con la Argentina, como con casi todos los países", fue el breve comentario de Trump.