Por eso, Amalia salió todos los días de su niñez y adolescencia del palacio de Huis ten Bosch ("Casa del bosque"), en las afueras de Ámsterdam, para ir a una escuela pública en la capital del país.
Y cuando terminó el colegio secundario, se mudó directamente a la capital neerlandesa para vivir como cualquier otra joven estudiante universitaria. Pero una grave amenaza se interpuso en su camino.
La mafia contra la princesa Amalia
Con apenas 19 años, se instaló en la gran ciudad y usaba, como millones de ciudadanos de ese lugar, la bicicleta como medio de transporte. En su caso, para asistir a la universidad. Hasta que los servicios secretos debieron intervenir de manera drástica. Tanto ella, la primera heredará como el jefe del gobierno, el primer ministro Rutte, recibieron amenazas de la "Mocro Maffia", como se conoce a la organización criminal que se mueve en el centro de Europa con la venta de droga, pero que tiene sus centros en Bélgica y los Países Bajos.
Los planes de libertad para Amalia se trastocaron por completo: el 5 de septiembre de 2022, debió regresar con custodia a vivir nuevamente con sus padres, en la residencia de Huis ten Bosch. Pero eso no impidió que la joven desarrollara, al mismo tiempo, sus obligaciones como princesa heredera y además, viajara con toda su familia por lugares como el Caribe, para visitas oficiales.
amalia y maxima .jpg
La reina Máxima y su hija mayor, Amalia, primera heredera en la línea sucesoria de los Orange (Foto: gentileza Vanity Fair).
En ese momento, hace 14 meses, declaraba: “Seré sincera: todavía lo estoy pasando muy mal. Extraño la vida de estudiante, pasear por la calle, entrar en una tienda sin problemas… y espero que las cosas cambien lo antes posible”. Ahora, las noticias de la realeza traen algo más positivo.
¿Vida secreta y amor en Madrid?
Amalia, por herencia y por estudio, habla perfectamente en castellano. Ello ayudó para que entre sus muchos viajes, Madrid, la capital de España, se volviera uno de sus lugares preferidos. Lo mismo puede decirse de los reyes Guillermo y Máxima, que se conocieron en Sevilla y toda la familia ha ido y animado, por ejemplo, la feria de abril, con bailes sevillanos y todo.
Amalia acompañó su madre a Madrid para la boda real de Victoria de Hohenlohe, duquesa de Medinaceli. Allí se la vio a la heredera muy contenta, como si los fantasmas de las amenazas estuvieran definitivamente en el pasado. Pero la prensa que sigue a las casas reales europeas dicen algo más.
amalia y boris .jpg
La prensa europea que sigue a la realeza habla de un romance de Amalia, la hija mayor de Máxima (Foto: gentileza Vanity Fair España).
Creen que en realidad, cuando la seguridad de Amalia mejoró, se le permitió viajar asiduamente a Madrid, o incluso pasar varios meses allí sola (con custodia, claro). En esa frecuencia de viajes y estadías, habría conocido a quien puede ser su novio o al menos, algo más que una amistad.
Se trata de Boris de Bulgaria. Su nombre completo es Boris de Sajonia-Coburgo-Gotha y Hungría, y es el hijo mayor del fallecido Kardam de Bulgaria, heredero de la corona de Bulgaria, que no existe, ya que su familia fue destronada por los comunistas, y tras la caída del muro, Bulgaria es una república parlamentaria.
amalia en madrid.jpg
La vida de Amalia de Holanda, reflejada en distintas revistas europeas.
La prensa especializada cuenta que durante la boda de Victoria de Hohenlohe, ambos jóvenes estuvieron juntos todo el tiempo. Boris es escultor y reside en Madrid, por lo que no es raro verlos tomando un cafe en algún lugar de Madrid o paseando por el tradicional y hermoso parque del Retiro, detrás del Museo del Prado.
La casa de Orange no ha dado ninguna información oficial al respecto. Ni sobre su vida sentimental o que tenga pensado radicarse por un tiempo en la capital española. Allí es una figura más anónima que en Ámsterdam y tal vez -con la custodia adecuada- pueda volver a la vida "lo más simple posible" de la que siempre le habla su madre Máxima.