Putin habló ante una plaza Roja en Moscú, especialmente preparada para demostrar su poder. Como cada 9 de mayo (salvo por la pandemia), Rusia celebra el fin de la II guerra Mundial con el triunfo y la rendición en Berlín del régimen nazi. Pero la actualidad y los planes de Putin fueron el eje de sus palabras.
Vladímir Putin, el poder ruso y su arsenal nuclear
El líder de Kremlin repitió un ritual como el de hace dos días, cuando juró por quinta vez consecutiva como cabeza del poder en Rusia. Esta vez, el esplendor de los salones del Kremlin dieron paso a la estridencia de una parada militar. Putin llegó para avanzar ante una multitud de efectivos -9.000 soldados- y altos generales y funcionarios del gobierno.
Todos formaban parte de una amplia escenografía en la Plaza Roja que incluyó toda la capacidad militar de ese país en un amplio desfile. Los aviones dibujaron en el cielo la bandera rusa al pasar sobre el presidente Putin y todos los allí presentes.
Su tono inició conciliador, como antesala de sus renovadas amenazas. "Rusia hará todo lo posible para evitar un enfrentamiento global", dijo, para luego dejar una advertencia: "Al mismo tiempo, no permitiremos que nadie nos amenace. Nuestras fuerzas estratégicas están siempre en alerta”.
Un lugar especial ocuparon en el desfile militar los vehículos que transportan a las ojivas nucleares. Rusia es el país que mayor arsenal de este tipo posee en todo el mundo.
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Ojivas nucleares en la plaza Roja de Moscú. Putin dijo que todo su sistema está en alerta permanente (Foto: captura de TV).
La ofensiva en Ucrania
Al asumir su quinto período presidencial consecutivo, Putin señaló que con la unidad del pueblo ruso conquistarán todos sus objetivos. Entre ellos figura el éxito en la guerra con Ucrania, que invadió en febrero de 2022.
Para los observadores internacionales, el desfile y el mensaje de este año contrasta con el de 2023. En ese momento, la contraofensiva de Ucrania estaba dando resultados, al recuperar varias ciudades y regiones del este de ese país, la zona en la que Rusia mantiene su control desde el momento de la invasión. Por eso, el desfile del año pasado fue más discreto, y el mensaje de Putin, menos ambicioso.
Pero con el paso del tiempo, Occidente ha ralentizado la ayuda económica y militar al gobierno ucraniano de Volodímir Zelenski, lo que afectó los combates contra Rusia. El ejército del Kremlin reconquistó espacios perdidos y cada vez aparece un mayor desequilibrio entre las fuerzas de ambos países.
Entonces, este año, el desfile fue imponente, con la seguridad que le da a Putin saber que hasta 2030, por lo menos, seguirá siendo el hombre fuerte de Rusia.
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Vladimir Putin organizó un imponente desfile en la Plaza Roja para demostrar el poderío militar de Rusia (Foto: captura de TV).
"Rechazamos las pretensiones de exclusividad de cualquier Estado o alianza. Sabemos a dónde conduce la exorbitancia de tales ambiciones", dijo Putin, rodeado de militares de alto rango. Quiere que Rusia deje de ser el pato de la boda en la confrontación a nivel estratégico y económico que mantienen Estados Unidos y China.
Putin siempre marca como determinante -y así lo fue- que Rusia derrotó en una larga y cruenta lucha el intento de Adolf Hitler de invadir y conquistar a ese país y llegar hasta Moscú. "Es como si Occidente quisiera olvidar las lecciones de la Segunda Guerra Mundial", recordó el presidente ruso.
Sostenido en su poderío nuclear, Putin sigue desafiando a Occidente.