El punto cero, es decir, el lugar donde encontraron el cuerpo del niño, fue también el espacio donde había estado jugando con su hermanita de ocho años. Según la información recabada, ella fue quien declaró que dejó a Lian solo en el puente donde ocurrió la tragedia. Sin embargo, este punto ha despertado la preocupación de la familia, ya que la zona no contaba con las medidas de seguridad necesarias para evitar un accidente.
El niño sabía nadar y conocía el lugar
Uno de los elementos que genera mayor sospecha en los familiares es que Lian no era ajeno al entorno del río. Según allegados y miembros de su familia, el niño tenía experiencia nadando en ese lugar y, además, era consciente de los puntos peligrosos del río. "Él nunca se metía en ese sector específico", indicaron, haciendo referencia a que Lian evitaba deliberadamente el área donde ocurrió la tragedia.
Esto ha llevado a la familia a preguntarse qué ocurrió realmente ese día. "Él sabía que del puente hacia ese lado no debía meterse. Entonces, ¿por qué habría estado allí esta vez?", expresaron con angustia, dejando abierta la posibilidad de que algo más haya sucedido, más allá de un accidente.
La última compañía: ¿qué pasó antes de la tragedia?
Otro de los puntos clave del caso es que, según el reporte de Crónica, Lian pasó sus últimos momentos con su hermana menor, y no con amigos, como se especulaba inicialmente. Esto llama la atención del periodista encargado de la cobertura, quien cuestiona las circunstancias en que dos niños, uno de 12 años y otro de 8, estaban solos un domingo por la noche junto al río, sin la supervisión de ningún adulto.
La madre de Lian estaba trabajando en el momento en que ocurrió el accidente, mientras que el padre se encontraba pescando en los alrededores, según se informó. Sin embargo, el padre desconocía que su hijo estuviera cerca del río ese día. Esta situación ha puesto de relieve una realidad común en pueblos pequeños: la autonomía con la que se manejan los niños, acostumbrados a desplazarse sin compañía adulta.
¿Qué pasó realmente en Salto?
El caso ha despertado inquietud entre los vecinos y generado una fuerte ola de conmoción en la comunidad. A medida que pasan las horas, surgen más preguntas sobre qué pudo haber llevado a Lian a ese sector del río donde nunca solía meterse. La familia, que busca explicaciones, no descarta ninguna hipótesis, al tiempo que se interroga por la falta de seguridad en el lugar y la ausencia de adultos en momentos críticos.
La tragedia no solo refleja el dolor de una pérdida irreparable, sino también la necesidad de revisar las dinámicas cotidianas en los pueblos donde los niños tienen una mayor independencia. ¿Podría haberse evitado la tragedia con mayor vigilancia? ¿O hubo algo más que influyó en el desenlace? Las dudas persisten, y la familia exige que se esclarezcan las circunstancias en torno a la muerte de Lian.