Después de obtener estos videos como evidencia en la causa que investiga a la jueza Makintach, agentes de la DDI de San Martín realizaron seis allanamientos por orden de la fiscalía en los domicilios de dos productoras (Feel Co y La Doble S.A.) y de profesionales independientes.
En los procedimientos se secuestraron discos rígidos, tarjetas de memoria, celulares, computadoras, cámaras, micrófonos y trípodes. Estos elementos quedaron a disposición de la Justicia para ser peritados.
Este operativo tenía el objetivo de encontrar pruebas que puedan confirmar que una cadena internacional contrató una productora argentina para obtener imágenes exclusivas del juicio por la muerte de Maradona, algo que está prohibido.
La testigo que complicó a la jueza Julieta Makintach
La policía Mirtha Barrionuevo, que presta funciones como custodia del tribunal donde se realiza el juicio por la muerte de Diego Maradona, declaró como testigo y complicó la situación de la jueza Julieta Makintach.
Barrionuevo relató que un día, previo a las audiencias, vio a una persona con una cámara y le advirtió que no podía grabar. Inmediatamente, la custodia de Makintach le confirmó que venían de parte de ella.
La policía sostuvo, además, que un seguridad le mostró un mensaje de su celular que habría sido de la magistrada: “Decile a la gente del TOC 3 que deje a mi gente”, se leía. La versión de Barrionuevo se confirmó con la aparición de las imágenes de las cámaras de seguridad.
En la última audiencia del juicio, tras el pedido de recusación de una de las defensas, la jueza Makintach se defendió. “Estoy convencida de que soy imparcial”, dijo. “Se necesitan pruebas y razones para fundar una recusación”, argumentó la magistrada, aunque dejó abierta la posibilidad de alejarse por propia voluntad: “Quizás sea yo la que me aparte”.