Julia Tactagi era considerada una referente del patín artístico en Paraná, una disciplina que abrazó desde muy pequeña. Comenzó a patinar a los 8 años y, desde entonces, construyó una trayectoria de más de 13 años que la llevó a competir en certámenes provinciales y nacionales, cosechando reconocimientos y el respeto de colegas y rivales.
Formaba parte del equipo técnico del Club Atlético Libertador San Martín (C.A.L. San Martín), donde no solo entrenaba a nuevos talentos, sino que también era una pieza clave en la planificación de competencias y en la formación de jueces y entrenadores. Además, se desempeñaba como profesora en la Fundación de Sol, donde enseñaba a niños y adolescentes, transmitiendo no solo técnicas de patinaje, sino también valores de compañerismo y perseverancia.
Su carisma, pasión y compromiso la habían convertido en un ejemplo para sus alumnos y para toda la comunidad deportiva. En una entrevista realizada en 2022, había confesado: “El patín artístico es mi vida, sin dudas”, una frase que hoy resuena con especial tristeza entre quienes compartieron con ella pistas, entrenamientos y viajes.
Colegas y alumnos destacaron su capacidad para enseñar con paciencia y amor, su alegría contagiosa y su energía incansable. Muchos recordaron una de sus frases favoritas: “En el patín, como en la vida, caerse es parte del camino; lo importante es levantarse y seguir”, palabras que hoy adquieren un sentido profundamente emotivo.
La Federación Entrerriana de Patín expresó su pesar a través de un comunicado en redes sociales, en el que manifestaron: “Pedimos una oración por su eterno descanso y fortaleza para sus familiares y amigos en este difícil momento”. También el Club Atlético Libertador San Martín suspendió temporalmente sus actividades en señal de duelo, y organizó una jornada de homenaje en memoria de Julia.
Desde el ámbito gremial, también llegaron muestras de solidaridad y apoyo. Julia era hija de Martín Tactagi, actual secretario adjunto de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer Paraná) y candidato a secretario general en las próximas elecciones del gremio docente. La conducción de Agmer emitió un mensaje en el que afirmaron: “Abrazamos y acompañamos a nuestro compañero y deseamos fortaleza y paz para toda su familia en este doloroso momento”.
La noticia de la muerte de Julia provocó una oleada de tristeza en redes sociales, donde cientos de amigos, colegas y exalumnos compartieron mensajes de despedida y recuerdos de su paso por el patín artístico. Muchas publicaciones incluyeron fotos de ella en competencias, con su característico atuendo brillante y la sonrisa que siempre la acompañaba.
Su familia permanece contenida por allegados y compañeros de trabajo de su padre, quienes se acercaron al domicilio familiar para brindar apoyo. “No hay palabras para describir este dolor”, expresó uno de los dirigentes de Agmer, quien resaltó la entereza con la que Martín Tactagi intenta sobrellevar la tragedia.
La comunidad educativa también se vio profundamente impactada. Muchos de los niños y adolescentes a los que Julia daba clases quedaron desconsolados ante la noticia, y los directivos de la Fundación de Sol informaron que están brindando contención psicológica a los alumnos más cercanos a ella.
El trágico accidente que terminó con la vida de Julia volvió a encender las alarmas sobre la seguridad vial en Paraná, especialmente en zonas de alto tránsito como la avenida Almafuerte, donde ya han ocurrido otros siniestros graves en los últimos años.
Vecinos del lugar reclamaron mayores controles, reductores de velocidad y campañas de concientización para conductores y motociclistas, con el objetivo de evitar nuevas muertes en la vía pública. También cuestionaron el mal estado de algunas calles y la escasa señalización, factores que, según advierten, aumentan el riesgo de accidentes fatales.
Especialistas en seguridad vial señalaron que el uso de elementos reflectantes, cascos certificados y el respeto a las velocidades máximas son claves para prevenir tragedias, aunque reconocieron que en casos como el de Julia, donde intervino un colectivo de gran porte, muchas veces el margen de reacción es mínimo.
El fallecimiento de Julia Tactagi no solo deja un vacío en el mundo del deporte, sino también en el corazón de quienes la conocieron. Su nombre quedará ligado a la historia del patín artístico entrerriano como símbolo de dedicación, alegría y superación.
“Era de esas personas que iluminaban cada lugar al que iban”, comentó una de sus compañeras del club, quien agregó que Julia siempre estaba dispuesta a ayudar y a motivar a quienes estaban comenzando en el deporte.
La comunidad de Paraná prepara distintas actividades de homenaje en los próximos días, incluyendo una caravana silenciosa de patinadores por las calles de la ciudad y una ceremonia en el club donde ella entrenaba.
Aunque su vida fue truncada de manera abrupta y dolorosa, el legado de Julia Tactagi seguirá vivo en cada niña y niño que se suba a un par de patines con la ilusión de alcanzar sus sueños, tal como ella lo hizo desde muy pequeña.