Para 2026, el monto crece de manera significativa: 355 millones de dólares. Pero más allá de la cifra total, el cambio central es la ampliación de la base de beneficiarios. Es decir, los clubes que históricamente concentraban los ingresos verán reducida su proporción en favor de instituciones medianas y pequeñas que también aportan jugadores a sus selecciones.
¿Por qué el Mundial 2026 implica un mayor esfuerzo económico?
El torneo que se jugará entre el 11 de junio y el 19 de julio de 2026 en Estados Unidos, México y Canadá será el más grande de la historia. Contará con 48 selecciones en lugar de 32, y un total de 104 partidos, contra los 64 que se disputaron en Qatar.
Esa expansión del calendario y el mayor número de convocados implican una carga extra para los planteles de los clubes, que pierden a sus figuras por períodos más largos. De ahí surge la necesidad de incrementar los pagos como forma de compensación.
Qué impacto tendrá en los clubes argentinos
Si bien aún no se conocen proyecciones oficiales, la medida representa una oportunidad para los equipos argentinos, que suelen aportar una gran cantidad de jugadores a distintas selecciones. En 2022, además de River, Boca Juniors, Vélez, Racing e Independiente recibieron compensaciones por futbolistas convocados a distintas selecciones.
Con un reparto más amplio y una bolsa mayor, el impacto económico podría ser aún más significativo en 2026, beneficiando no solo a los grandes sino también a instituciones que forman parte del proceso de clasificación con futbolistas juveniles y promesas que emigraron recientemente.
Cómo funciona el programa de solidaridad de la FIFA
El esquema no es nuevo: entre 2020 y 2024, más de 900 equipos de 55 federaciones recibieron compensaciones por ceder jugadores a sus selecciones nacionales en partidos de clasificación. El programa se basa en la premisa de que los clubes cumplen un rol fundamental en la formación y disponibilidad de los futbolistas, y por eso deben ser parte del reparto económico cuando sus jugadores participan en torneos internacionales.
El aumento del 70% anunciado por la FIFA marca un precedente en el vínculo con los clubes y pone de manifiesto la magnitud del Mundial 2026. A medida que crece el espectáculo, también se refuerza la idea de una distribución más justa de los ingresos en el fútbol global.