A dos años del intento de magnicidio, que no es otra cosa que la pretensión de matar violentamente a una persona muy importante por su cargo o poder, están sentados en el banquillo de los acusados como los autores materiales: Fernando Sabag Montiel, el hombre que gatilló a 20 centímetros de la cabeza de Cristina Kirchner; quien lo acompañaba, Brenda Uliarte; y el sospechoso de participar del plan, Gabriel Carrizo.
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Las conexiones con la pista Milman y Revolución Federal
Aunque ni la pista Milman ni Revolución Federal son objeto de análisis en el juicio oral, tanto la querella como la fiscal Gabriela Baigún se ocupan de vincular ambas causas con la presunta autoría intelectual o financiera del ataque.
En la denominada pista Milman, se examina una denuncia del exdiputado por la provincia de Santa Fe, Jorge Abello, quien aseguró que dos días antes del atentado a Cristina Kirchner, escuchó en el bar de la esquina del Congreso cómo el diputado Gerardo Milman le decía a sus colaboradoras, Ivana Bohdziewicz y Carolina Elizabeth Gómez Mónaco: “Cuando la maten yo estoy camino a la Costa”.
De acuerdo a su versión, se lo contó por teléfono a su jefe, el diputado Marcos Clerici, pero hasta ahora ese mensaje no fue identificado por los peritos informáticos.
La causa contra los miembros de la organización Revolución Federal se basa en la supuesta incitación al odio contra dirigentes del Frente de Todos. Los investigadores detectaron transferencias millonarias provenientes de fideicomisos administrados por Caputo Hermanos, que fueron destinados a la cuenta de uno de los dirigentes de esta agrupación, Jonathan Morel.
El testimonio de Cristina y el avance del juicio
A pesar de la insistencia de los abogados de la querella, la justicia rechazó vincular la pesquisa con el ataque a Cristina Kirchner.
Precisamente, la expresidenta afirmó que los autores intelectuales y financieros del intento de asesinato “duermen protegidos por Comodoro Py". Agregó que “solamente en la hipérbole argentina puede suceder que cuando entra mi persona en el rol de acusada o de víctima, se queman todos los códigos penales, de procedimiento y hasta la constitución”.
¿Qué se expuso en el juicio oral?
El 26 de junio comenzó el juicio oral por el intento de magnicidio contra Cristina Kirchner por el cual están acusados Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte como coautores de tentativa de homicidio doblemente calificado por alevosía y el concurso premeditado de dos o más personas agravado por el uso de arma de fuego, en tanto, Nicolás Carrizo, como partícipe secundario.
Durante su indagatoria, Sabag Montiel confesó que quería matar a la exmandataria porque era una corrupta; Brenda Uliarte quiso declarar, pero luego se arrepintió; mientras que Nicolás Carrizo aseguró que los chats donde escribió sobre el supuesto plan para matar a la vicepresidenta habían sido una broma.
Sabag está preso en el Complejo 1 de Ezeiza, Uliarte en la Unidad 31 de mujeres de Ezeiza, y Carrizo en Marcos Paz. No mantienen contacto entre ellos ni con otros detenidos, ni siquiera durante los traslados. Cada miércoles, cuando se realizan las audiencias orales en los tribunales de Comodoro Py, se refuerza la seguridad por temor a incidentes.
Declararon como testigos custodios y colaboradores de la exvicepresidenta, las personas que se ocuparon de detener al atacante, y los militantes kirchneristas que participaban del cordón humano para evitar que se abalancen los seguidores que se reunían en la puerta de su casa, en Uruguay y Juncal.
El jefe de la seguridad de la exvicepresidenta, Daniel Carbone, explicó en el juicio que no tenían advertencias de amenaza de atentado, aunque había un ”clima enrarecido”. Puntualizó que en una ocasión le dijo a Cristina Kirchner que los riesgos “pueden ser desde un huevazo, hasta un tiro… nunca pensamos que iba a ser un tiro”.
En las próximas semanas seguirán llamando a los más de 200 testigos ofrecidos por las partes, que incluyen más custodios, policías, militantes, periodistas, psicólogos, peritos y amigos de los imputados. Escucharlos llevará varios meses, por lo que estiman que el veredicto recién se conocería el año que viene.
Recordemos que los hechos que se investigan se produjeron cuando Cristina Kirchner se bajó del auto frente a la puerta del edificio donde vivía en Recoleta, y al acercarse a saludar a los manifestantes, Sabag Montiel apuntó con una pistola Bersa a 20 centímetros de su rostro, y tiró de la cola del disparador. Según los expertos, la bala no salió porque no estaba en la recámara. La detención del agresor fue llevada a cabo por un grupo de civiles que vieron la maniobra, quienes levantaron el arma del piso.
