A24.com pudo saber que la justicia hubiera deseado mantener a resguardo los procedimientos para evitar que las filtraciones pusieran en alerta a los posibles eslabones en la cadena de mando de las organizaciones involucradas. No obstante, fuentes tribunalicias señalaron que el entorpecimiento del trabajo no llegó a mayores.
Para proteger la pesquisa, el juez federal Sebastián Casanello tomó dos decisiones: por un lado, dispuso el secreto de sumario, y por el otro, extrajo testimonio de las actuaciones para solicitar que se investigue si existió delito en la filtración de los 28 allanamientos que ordenó realizar la semana pasada a pedido del fiscal Gerardo Pollicita.
Esta denuncia basada en la duda de que haya existido una fuga de información cuando se había pedido máxima reserva, fue asignada por sorteo a la jueza Maria Eugenia Capuchetti.
Mientras tanto, la Justicia sigue analizando las pruebas obtenidas para terminar de delinear las imputaciones y definir los llamados a indagatoria.
El estado de la causa
En las últimas horas, el juez federal Sebastián Casanello dispuso el secreto de sumario, antes de autorizar un nuevo allanamiento en busca de información relacionada con la rendición de gastos en las organizaciones sociales investigadas por presunta extorsión a piqueteros.
Según explicó una testigo, los planes Potenciar Trabajo consisten en el giro del dinero a las unidades de gestión controladas por las organizaciones sociales o los intendentes, para que se ocupen de repartirlo entre los ciudadanos vulnerables que lo soliciten.
Con este dato, quieren enfocarse en la facturación de las asociaciones a la que pertenecen los dirigentes sospechados, que provienen del Polo Obrero (PO), el Movimiento Barrios de Pie y el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL).
A todo esto, quedó pendiente la respuesta a un planteo de nulidad del allanamiento en la sede de la Asociación Civil Polo Obrero, entre otras razones porque se realizó sin aviso previo, teniendo en cuenta la restricción que rige para las cooperativas.
El lunes el fiscal Pollicita responderá el reclamo, y la última palabra la tendrá el juez.
Asimismo resta que se defina si el Ministerio de Capital Humano podrá convertirse en querellante en la causa. La cartera que dirige Sandra Pettovello tiene mejor chance de lograrlo que la de su par, Patricia Bullrich. Recordemos que Casanello rechazó un pedido similar del Ministerio de Seguridad, porque entendió que era incompatible con su rol como auxiliar de la justicia.
Este expediente surge de una denuncia efectuada por el Ministerio de Seguridad de la Nación en base a las llamadas recibidas a través de la Línea 134, donde hasta el 20 de diciembre de 2023 se registraron más de 13 mil mensajes, de los cuales 924 llegaron a la justicia por cumplir con los parámetros de verosimilitud con algún delito. En Comodoro Py quedaron 45 casos con jurisdicción en la ciudad de Buenos Aires, y los otros fueron derivados a la jurisdicción donde se detectaron los hechos.
Aunque el juez Casanello aún no determinó quiénes quedarán imputados, el fiscal Pollicita apuntó contra 28 personas, para quienes le pidió al juez que disponga su detención e indagatoria.
En su requerimiento, el fiscal sostuvo que logró comprobarse preliminarmente que actuaron bajo el amparo de la apariencia de una actividad solidaria como es la administración de un comedor popular, valiéndose de las facultades que les otorgó el ex Ministerio de Desarrollo Social de la Nación para administrar el Plan Potenciar Trabajo.
Indicó que tiene elementos para presumir que estas personas amenazaban sistemáticamente a los denunciantes de darlos de baja del plan o negarles alimentos si no cumplían con sus exigencias.
Para mantenerlos como beneficiarios de la prestación social, les exigieron dinero, o les cobraron por la entrega de alimentos que recibían gratuitamente del gobierno, los obligaron a vender por la zona la comida recibida del Estado Nacional para quedarse con las ganancias, los forzaron a participar de movilizaciones de las agrupaciones políticas a las que pertenecen, e incluso a repartir volantes de candidatos a comicios electorales.
A su vez, Pollicita determinó que habían montado un sistema de control y de sanciones sobre las víctimas, que incluyó la toma de asistencia a las movilizaciones, la confección de “listas de castigados”, la imposición de multas por faltar a una marcha, y la prohibición de retirar alimentos por plazos determinados.
¿Quién es quién en la causa?
Piquetes: 27 allanamientos y varios imputados por "extorsión" a manifestantes para que concurran a protestas (Foto: archivo)..jpeg
El fiscal Gerardo Polliccita encontró elementos para sospechar de 28 personas ligadas a las organizaciones sociales, por lo que le pidió al juez Sebastián Casanello que ordene su detención y los llame a declarar en indagatoria. Según la investigación estas serían las razones por las que deberían quedar imputados en la causa:
- Jeremías CANTERO: integra la Asociación Civil Polo Obrero, y coordina el funcionamiento de varios comedores en esta ciudad. Presuntamente intervenía en la toma de decisiones acerca de las exigencias coactivas y extorsivas a las víctimas.
- Elizabeth del Carmen PALMA: integra la Asociación Civil Polo Obrero, donde se ocupa de cargar en el sistema informático los datos que supuestamente permitían que las víctimas cobrasen o dejasen de cobrar el plan social. Aparece en una escucha telefónica con Cantero donde manifiesta su preocupación respecto a la posibilidad de que se los investigue por lavado de dinero en relación a las cooperativas de trabajo.
- Gianna PUPPO: referente del Comedor Rivadavia, del Polo Obrero, sospechada de impartir directivas generales a los delegados y transmitir a las víctimas las exigencias coactivas y extorsivas.
- María Isolda DOTTI: alias Tango, integra la cooperativa El Resplandor del Polo Obrero. Supuestamente fue quien transmitía a las víctimas las exigencias coactivas con gritos y amenazas violentas. En el allanamiento de sus bienes se secuestraron 54.000 dólares, que según ella manifestó en varias entrevistas, los recibió por herencia familiar.
- Iván Ezequiel CANDOTTI: referente del comedor Rivadavia, apuntado porque habría impartido directivas generales a los delegados y transmitido a las víctimas las exigencias coactivas y extorsivas, ejerciendo el control de la participación en las movilizaciones y confeccionando las listas de asistencia.
- Gustavo Guillermo VÁSQUEZ: referente del comedor La Carbonilla del Polo Obrero, presuntamente impartía las directivas generales a los delegados y a los que se acercaban al comedor a recibir ayuda social, transmitiendo a las víctimas las exigencias coactivas y extorsivas.
- Carlos FERNÁNDEZ KOSTIUK: referente del Comedor Kuña Guapa, en Villa 21-24, que administra el FOL, sospechado de forzar a los piqueteros a presentarse a las marchas.
- Gloria PARAGUAY ESTRADA: referente del Comedor Caminos de Tiza, administrado por Barrios de Pie, quien habría transmitido las exigencias coactivas y extorsivas a los integrantes del comedor en lo relativo a asistencia a movilizaciones, pago de cuotas y retiro de mercaderías.
- Dina Patricia IRAMAIN, Blanca Beatriz CHUQUIMIA TARQUINO y Brisa Noelia PAUCARA CHOQUE, delegadas en los comedores del Polo Obrero, apuntadas por supuestamente transmitir exigencias coactivas a las víctimas.
- Ronald VARGAS ROCABADO: delegado del comedor Rivadavia, que aparentemente percibía el monto en concepto de “alquiler del comedor”.
- Elizabeth Galindo MAMANI: delegada del comedor Rivadavia, quien supuestamente cobraba las “cápitas” mensuales.
- Cinthya DELGADO VILCHES: delegada del comedor La Carbonilla, que estaría encargada de transmitir las exigencias coactivas, tomar listas de asistencia y exigir y cobrar el dinero a las víctimas.
- Lesli SALIRROSAS CASTILLO: delegada del comedor La Carbonilla , que mantiene una conversación que aparece en una de las capturas de chats, donde comunicaba a los integrantes del grupo de la existencia de nuevas vacantes en el comedor, pidiendo que estén activos en sus movilizaciones para poder participar del comedor.
- Damariz Erika VILLAFUERTE: delegada del comedor La Carbonilla, quien supuestamente pasaba la lista de las personas a las cuales se le iba a entregar mercadería, para lo que debian llevar bolsas y 1,000 pesos.
- Gloria JARAMILLO MORALES: delegada del comedor Mariano Ferreyra del Polo Obrero, que aparece sospechada por las capturas de chats intimidando a las víctimas a ir a la movilizaciones si quieren recibir alimentos del Estado.
- Lucca Philippe QUISPE RASHUAMAN: delegado del Polo Obrero, que aparece en los chats invitando a retirar mercadería sólo a los “compañeros que participan activamente”.
- Yoao Ariel ESCOBAR ROJAS: delegado del Polo Obrero, sospechado de amenazar a las víctimas y controlar la participación en las marchas.
- María Cecilia COWPER, Mercedes FOSSAT, Manuel ALONSO, Lorenzo “Toto” MARTELLI, Ada Mabel VERA PERALTA y Leticia Maribel DUARTE ROMERO: delegados del comedor Kuña Guapa, sindicados como los encargados de transmitir a las víctimas las exigencias coactivas y extorsivas en lo relativo a asistencia a “marchas”, pago de cuotas y retiro de alimentos y mercadería. Si no asistían se le aplicaban multas de 10 mil pesos o se retenían mercaderías.
- Nilsa Elena TORRES: delegada del FOL, sospechada de confeccionar las listas de asistencia a las “movilizaciones” a las que se exigía concurrir.
- Rossmery GRANDE ARANCIBIA: delegada de Barrios de Pie, presuntamente dedicada a contribuir en la intimidación de las víctimas, se ocupaba del cobro de las cuotas;
- Nery ACHA DAZA: referente de Barrios de Pie, quien supuestamente se encargaba de controlar las asistencias a las actividades realizadas en el comedor, y aparece en los mensajes reiterando una frase: “Se tomará en cuenta esta participación”.
El juez Casanello ordenó la inhibición preventiva de los bienes de todos los investigados a la vez que ordenó las pericias de todo el material secuestrado durante los 32 allanamientos simultáneos.
Incautaron 31 teléfonos celulares, 31 notebooks, recibos de pago, y planillas de asistencia a manifestaciones. Además encontraron 33 tarjetas de crédito, 199 euros, 76.764 dólares y 8.769.909 pesos en efectivo.