El gesto de la intendenta se suma a otras expresiones simbólicas que el espacio político desplegó en las calles. Días atrás, militantes de La Cámpora y organizaciones afines realizaron una vigilia frente a la residencia de Cristina Kirchner, en el barrio porteño de Constitución. Allí, varios de los presentes lucieron tobilleras artesanales decoradas con flores, luces LED y retratos de la ex presidenta, como modo de protesta y muestra de solidaridad.
Además, Mendoza fue una de las oradoras más críticas contra el fallo judicial. En declaraciones radiales, sostuvo que la vicepresidenta “nunca tuvo un juicio justo” y denunció que la sentencia forma parte de una “condena ilegal” con tintes políticos. También afirmó que el objetivo final del proceso judicial es “proscribir a Cristina”, en línea con el discurso que el kirchnerismo mantiene desde que se conoció el fallo en 2022.
Este tipo de manifestaciones se dan en un contexto de creciente tensión política. La Corte Suprema rechazó la semana pasada el último recurso presentado por la defensa de la ex mandataria y dejó firme la condena por el caso conocido como "Vialidad", que investigó el direccionamiento de obras públicas en la provincia de Santa Cruz.
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En paralelo, sectores del peronismo iniciaron una nueva campaña pública bajo el lema “Argentina con Cristina”, con el objetivo de denunciar una supuesta persecución judicial y política. La convocatoria incluye marchas, actos y una movilización prevista hacia la Plaza de Mayo en las próximas semanas.
Desde el oficialismo nacional, sin embargo, hubo hasta ahora silencio oficial sobre las expresiones de Mendoza y otras figuras de La Cámpora. Pero en el plano político, el gesto de la intendenta no pasó desapercibido y fue ampliamente replicado en redes sociales, donde cosechó tanto elogios como fuertes críticas.