"¿Puedes quitar esto? Es un riesgo para la seguridad", dice el primer contacto que recibió Jack Sweeney, citado por el portal Protocol durante el pasado otoño. A la mañana siguiente, el joven respondió que lo haría a cambio de un Tesla Model 3.
El joven le explicó a Musk que lleva tiempo haciendo esto y aprovechó para advertir, y demostrar, al empresario que no está cuidando tan bien su privacidad como creía. El CEO, a su vez, tuvo que hacer una propuesta rápida para solucionar el problema.
"¿Qué tal u$s 5.000 por esta cuenta y, en general, ayudarme a que sea un poco más difícil para los locos rastrearme?", le dijo Musk a través de Twitter al joven.
Sweeney redobló la oferta y pidió 50 mil dólares, alegando que invertiría ese dinero en capacitarse y posiblemente en un coche de Tesla. A lo que el hombre más rico del mundo prometió pensarlo, pero hasta el momento no ha pagado un centavo y el perfil sigue activo.