El pastel de pollo y verduras es una versión más liviana y nutritiva del clásico de la cocina casera. Ideal para los días fríos, esta receta es fácil de preparar y se convierte en una excelente opción para una comida completa y reconfortante.
Cuando bajan las temperaturas, las comidas al horno se convierten en grandes aliadas. Nada mejor que un plato caliente, abundante y sabroso para reconfortar el cuerpo. En ese contexto, el pastel de pollo y verduras aparece como una alternativa liviana y nutritiva al clásico pastel de carne, que suele ser más pesado.
Lo mejor de esta receta es que combina ingredientes simples y accesibles, es fácil de hacer y, además, permite incorporar diferentes verduras para sumar color y nutrientes.
El pastel de pollo y verduras es ideal para almuerzos o cenas familiares, y también se puede preparar con anticipación y recalentar al día siguiente. Es versátil, rendidor y una gran opción para quienes buscan platos más livianos sin resignar sabor.
Para la base:
2 pechugas de pollo cocidas y desmenuzadas
1 cebolla
1 morrón rojo o verde
1 zanahoria
1 taza de arvejas (pueden ser congeladas)
1 cucharada de aceite
Sal, pimienta y condimentos a gusto (puede ser pimentón, orégano, ajo en polvo)
Para la cubierta:
4 papas medianas
1 cucharada de queso crema o un chorrito de leche para suavizar el puré
Sal y nuez moscada a gusto
Opcional: queso rallado para gratinar
Preparar las verduras. Pelar y picar la cebolla, el morrón y la zanahoria. Saltear todo en una sartén con una cucharada de aceite hasta que las verduras estén tiernas.
Incorporar el pollo. Agregar el pollo cocido y desmenuzado a la sartén. Mezclar bien y sumar las arvejas. Condimentar con sal, pimienta y las especias elegidas. Cocinar todo junto por unos minutos para que se integren los sabores.
Hacer el puré. Mientras tanto, hervir las papas peladas hasta que estén bien tiernas. Hacer un puré suave, agregando una cucharada de queso crema o un chorrito de leche para que quede cremoso. Condimentar con sal y nuez moscada.
Armar el pastel. En una fuente apta para horno, colocar primero el relleno de pollo y verduras. Cubrir con el puré de papas, distribuyéndolo de manera pareja. Si se desea, espolvorear queso rallado por encima para gratinar.
Hornear. Llevar al horno precalentado a 180°C durante aproximadamente 15 a 20 minutos, o hasta que la superficie esté apenas dorada.
Para reducir aún más las calorías, se puede hacer el puré con leche descremada o reemplazar parte de la papa por puré de calabaza.
Si no se dispone de pollo cocido, se puede hervir o saltear pechugas previamente. También se puede utilizar pollo que haya sobrado de otra preparación.
Este pastel se conserva muy bien en la heladera por 2 o 3 días y se puede recalentar sin problemas.
El pastel de pollo y verduras es una excelente opción para los días fríos. Es fácil, rápido, liviano y muy rendidor. Lo mejor es que se puede adaptar a los ingredientes que haya en casa y sumar distintas verduras según la temporada.
Perfecto para quienes buscan una comida casera, nutritiva y sin complicaciones, este pastel es de esos platos que se disfrutan en familia y que siempre invitan a repetir.
