Por el enojo con que no fue conductora cuando se lesionó De Brito y en su lugar estuvo Pepe Ochoa. Marixa dijo: "No, para mí no. No quiero conducir más este programa", lanzó de manera directa, dejando en claro que su vínculo con LAM había llegado a su fin. Pero lejos de la polémica o el escándalo, Marixa explicó que su decisión tiene que ver con una necesidad de alejarse del formato y encontrar tranquilidad.
"No quiero ser conductora de chimentos"
Durante el mismo momento televisivo, Balli se sinceró: "No quiero ser conductora de chimentos. No tengo información. Dejen de j**** con eso". Con esa frase contundente, buscó cerrar cualquier especulación sobre un posible conflicto con el resto del equipo o con la producción del programa.
Además, aclaró que su decisión no está motivada por enojo ni roces internos: “No estoy enojada con nadie. Las amo a todas. Pero necesito relajarme”.