Sin embargo, el éxito en las redes sociales se convirtió en una espada de doble filo para Cibelly Ferreira. Se especula que las autoridades educativas de la escuela donde trabajaba se sintieron incómodas con la atención que los videos estaban generando y decidieron despedirla.
Paradójicamente, en lugar de frenar su popularidad, el despido catapultó a Cibelly a la fama. Muchos usuarios de TikTok la felicitaron por su talento para el baile y la alentaron a buscar trabajo en una escuela que valorara su creatividad y dedicación.
"No te preocupes, Cibelly, seguro encontrarás un nuevo trabajo pronto", escribió uno de sus seguidores. "Y con una profesora así, hasta yo iría a clases los domingos", bromeó otro.
Mientras tanto, Cibelly Ferreira continúa buscando oportunidades como profesora de inglés en Brasil, y sus videos de baile siguen acumulando seguidores en TikTok. Su historia destaca cómo las redes sociales pueden convertir a alguien en un fenómeno en cuestión de días y cómo los prejuicios y la intolerancia pueden tener consecuencias no deseadas en el mundo laboral.