EDUCACION

Censo nacional docente: ¿Aplica a los no docentes?

El Ministerio de Capital Humano puso en marcha el Relevamiento Nacional de Personal Educativo (ReNPE), que sirve para definir políticas educativas para los próximos años.

Censo nacional docente: ¿Aplica a los no docentes?

El Relevamiento Nacional de Personal Educativo (ReNPE) puso en movimiento a escuelas de todo el país. Docentes, directivos y equipos administrativos comenzaron a recibir mensajes sobre la necesidad de completar el formulario digital que impulsa el Ministerio de Capital Humano, con el objetivo de actualizar y centralizar datos sobre quienes trabajan en el sistema educativo. Pero en los pasillos y grupos de WhatsApp escolares surgió rápidamente una pregunta clave: ¿este censo es solo para docentes o también incluye a los no docentes?

La respuesta es clara: sí, el censo también alcanza a personal no docente, siempre que forme parte de la institución educativa. Y no se trata de un detalle administrativo. La decisión de incluirlos está directamente vinculada a cómo se quiere leer, entender y reorganizar el mapa laboral del sistema.

¿Qué es exactamente el ReNPE?

El ReNPE es un censo nacional aprobado por el Consejo Federal de Educación a través de la Resolución CFE Nº 478/24. Su objetivo es actualizar información laboral, formativa y sociodemográfica del personal que trabaja en escuelas, tanto de gestión estatal como privada, social y cooperativa. La última vez que se relevó esta información a gran escala fue hace más de una década, y desde entonces el sistema educativo cambió profundamente: más estudiantes, nuevas modalidades, cargos reformulados y nuevas dinámicas institucionales.

Por eso, el Gobierno busca generar una base de datos actualizada e integrada al Sistema Integral de Información Digital Educativa (SInIDE) y la Base Nacional Homologada (BNH), dos herramientas que sirven para diseñar políticas públicas basadas en evidencia.

Entonces, ¿a quiénes alcanza?

El ReNPE no es solo para quienes están frente a curso. Incluye a:

  • Docentes de todos los niveles y modalidades (inicial, primaria, secundaria, técnico-profesional, especial, adultos, artística, rural, etc.).
  • Directivos y equipos de conducción.
  • Personal no docente que trabaja en escuelas, como:
  • Preceptores
  • Bibliotecarios y auxiliares de biblioteca
  • Secretarios, administrativos y personal de gestión institucional
  • Asistentes pedagógicos, acompañantes técnicos y operadores socioeducativos
  • Personal de apoyo escolar cuya función esté reconocida por la institución

Es decir, si tu tarea está registrada dentro de la escuela y forma parte de su funcionamiento operativo o pedagógico, el censo te corresponde.

¿Quiénes no están incluidos?

El censo no aplica al personal universitario, dado que el sistema terciario y universitario se rige por otras normativas de información.

Tampoco están incluidos, salvo que la jurisdicción indique lo contrario, aquellos trabajadores tercerizados, como algunos equipos de limpieza o mantenimiento que no dependen de la planta institucional.

¿Por qué se incluyó a los no docentes?

Porque la escuela no funciona solo gracias a quienes dictan clases.

La organización escolar real —la que se vive todos los días— incluye:

  • Quien abre el edificio y lo mantiene en condiciones
  • Quien carga datos en el sistema
  • Quien acompaña a un estudiante que necesita apoyo
  • Quien gestiona trámites con supervisión o ministerio
  • Quien sostiene el clima institucional en el aula, la biblioteca o los pasillos

La foto que se quiere capturar no es solo pedagógica: es laboral y humana.

Reconocer ese entramado permite evaluar necesidades, inequidades, cargas horarias, perfiles de formación y distribución de tareas.

¿Es obligatorio completar el censo nacional docente?

Sí.

El carácter es obligatorio tanto para docentes como para no docentes.

No completar el relevamiento no suele implicar sanciones económicas directas, pero puede traer complicaciones administrativas más adelante, como:

  • Dificultades para actualizar legajos
  • Obstáculos en concursos, ascensos o movimientos de cargo
  • Requerimientos posteriores de completar el trámite “a contrarreloj”

En síntesis: nadie va a tocar el timbre de tu casa, pero dejar el formulario colgado puede volverse un problema burocrático innecesario.

¿Cómo se completa?

El proceso se inicia cuando la institución valida la nómina del personal.

Luego, cada trabajador/a recibe la indicación para completar su formulario individual.

El trámite se realiza online, a través de la plataforma oficial o la app Mi Argentina.

Toma entre 10 y 30 minutos y puede pausarse y retomarse.

Una vez enviado, se puede descargar constancia de finalización.

La importancia de estar “en la foto”

Participar del censo no es solo cumplir con una formalidad.

Es una forma de hacer visible tu rol dentro de la escuela, en un momento en el que se discuten funciones, cargas laborales, capacitación y distribución presupuestaria.

Quienes no aparecen en los datos, en la práctica, no cuentan a la hora de diseñar políticas públicas.

Completarlo es, en cierto modo, reafirmar el lugar que cada uno ocupa en la trama educativa.