Qué pasó con Alfredo Pesquera, el acusado en la muerte del Porto Rodrigo Bueno
El juicio por la muerte del reconocido cantante cuartetero Rodrigo Bueno tuvo todas las miradas están puestas en Alfredo Pesquera, el empresario y único acusado en este caso que conmocionó a Argentina. El trágico accidente automovilístico que se cobró la vida del ídolo cuartetero el 24 de junio de 2000 dejó una herida abierta en el corazón de sus fanáticos. Hoy, 24 de mayo, Rodrigo Bueno podría haber cumplido 50 años.
El proceso judicial, llevado a cabo en los Tribunales de Quilmes, reunió a familiares de Rodrigo Bueno, seguidores del cantante y medios de comunicación de todo el país. La sala se convirtió en un escenario donde se exponen los detalles y testimonios que pretendían revelar la verdad detrás de aquella fatídica noche que cambió para siempre la vida de miles de personas.
La acusación sostiene que Alfredo Pesquera fue acusado como responsable del accidente que se cobró la vida del "Potro". Según la versión oficial, Pesquera encerró al Potro Rodrigo en la Autopista Buenos Aires La Plata.
Durante el juicio, se presentaron pruebas y testimonios claves para determinar la responsabilidad del acusado. Los peritos analizaron minuciosamente el estado del vehículo y la escena del accidente, mientras que los testigos presenciales relataron los momentos previos y posteriores al trágico suceso.
El proceso generó una enorme expectativa mediática y despertó el interés de la opinión pública. La muerte de Rodrigo Bueno marcó un antes y un después en la historia del cuarteto argentino, y la posibilidad de conocer la verdad sobre lo sucedido despertó emociones encontradas en sus seguidores, quienes ansían justicia y respuestas.
Por su parte, Alfredo Pesquera fue declarado inocente y absuelto durante el juicio y no tuvo responsabilidad directa en el accidente.
El empresario Alfredo Pesquera, quien estuvo imputado y luego absuelto en 2000 por la muerte del cantante Rodrigo Bueno, fue hallado muerto en su camioneta con un disparo en 2013. Pesquera era buscado y acusado por el asesinato del financista Miguel Angel Graffigna en la Ciudad de Buenos Aires. Las autoridades presumen que se trata de un suicidio.
Fuentes policiales confirmaron que el cuerpo de Alfredo Pesquera fue encontrado sin vida en su camioneta BMW X6 negra, estacionada en la zona norte de la ciudad de Buenos Aires. Presentaba una herida de bala y se encontró un arma junto a él en el piso del vehículo, lo que lleva a la principal hipótesis de que el empresario se habría quitado la vida.
Pesquera estaba siendo buscado a nivel nacional e internacional, ya que la policía lo acusaba de asesinar al financista Miguel Angel Graffigna debido a una deuda impagada. El juez de instrucción porteño Javier Ríos había ordenado su detención en relación con este caso.
La decisión del juez se basó en una exhaustiva investigación de seis meses llevada a cabo por la fiscal María Paula Asaro. Durante la investigación, se encontraron evidencias como un GPS, un cabello y la compra de un arma que apuntaban a la posible implicación de Pesquera en el crimen.
El asesinato de Graffigna ocurrió el 7 de junio del mismo año, cuando recibió un disparo en la cara dentro de su automóvil Peugeot RCZ estacionado en el barrio de Villa Ortúzar, en la Ciudad de Buenos Aires. Según la investigación, el GPS del vehículo de la víctima reveló que el último lugar donde había estado antes de estacionar a 15 cuadras de donde fue asesinado era frente al domicilio de Pesquera en la calle Tronador.
En el interior del automóvil de Graffigna se encontraron manchas de sangre y numerosos papeles revueltos tanto en el habitáculo como en el baúl. Además de haber recibido un disparo, la víctima presentaba signos de haber sido golpeada. Vecinos del barrio aseguraron haber escuchado disparos alrededor de las 2 de la madrugada.
La investigación reveló que Graffigna administraba negocios del empresario y luchador Jorge "Acero" Cali. Según la fiscal Asaro, Graffigna propuso a Pesquera que invirtiera dinero en un espectáculo que Cali tenía planeado en el Luna Park, como forma de saldar una deuda. Se sospecha que Pesquera se negó a pagar y que la relación se volvió tensa cuando se lo comunicó a Graffigna.
En relación con este caso, los investigadores encontraron extraño que Graffigna hubiera adquirido una pistola Glock calibre 40 días antes del asesinato, la cual nunca fue encontrada. Sin embargo, el arma utilizada en el crimen coincide con ese calibre, lo que lleva a los investigadores a creer que en la noche del 7 de junio, Graffigna estaba armado cuando se encontró con Pesquera para reclamarle la deuda.
La fiscal y el juez Ríos habían ordenado la captura de Pesquera y un allanamiento en un domicilio en el barrio de Belgrano, donde se sospechaba que podría haber residido. Desde el momento del crimen, el empresario se había mudado en cuatro ocasiones.
Alfredo Pesquera saltó a la fama cuando fue acusado de haber causado el accidente en el que fallecieron Rodrigo Bueno y Fernando Olmedo, hijo del reconocido humorista Alberto Olmedo. Sin embargo, en un juicio oral en 2001, Pesquera fue absuelto por el Tribunal Oral en lo Criminal 2 de Quilmes, que determinó que fue una mala maniobra de Rodrigo la que ocasionó el accidente. Posteriormente, en febrero de 2007, Pesquera fue condenado por la Justicia de La Plata por "estafas reiteradas".
