Golpes al colectivo y detención inmediata
En medio de los gritos, el agresor arremetió contra los espejos del colectivo, golpeándolos con violencia hasta destrozar uno de ellos. La escena fue presenciada por varios testigos, quienes llamaron de inmediato a la Policía.
Minutos después, un patrullero se hizo presente en el lugar y detuvo al agresor, quien fue trasladado a una comisaría local, donde quedó alojado durante el fin de semana.
El hecho quedó registrado por cámaras de seguridad, y las imágenes —difundidas por la Policía de Córdoba— muestran con claridad la brutalidad del ataque y la rapidez con la que intervino la fuerza de seguridad.
El joven ahora enfrenta cargos por daños a la propiedad y alteración del orden público, y se espera que en los próximos días se defina su situación judicial.