La tensión entre la Selección Argentina y la Federación de Fútbol de Chile escaló tras el revuelo que se generó en el aeropuerto Arturo Merino Benítez, cuando la delegación albiceleste arribó al país vecino para disputar la fecha 15 de las Eliminatorias Sudamericanas. La imagen de los jugadores entre una multitud y los insultos recibidos por parte de hinchas locales generaron el repudio inmediato desde la AFA, que acusó un incumplimiento del protocolo FIFA.