Puede la lesión acelerar una salida del Matador
El 2025 de Cavani estuvo marcado por los problemas físicos, especialmente por la inflamación en el psoas que arrastra desde hace meses y que se convirtió en el origen de todas las molestias que lo alejaron de la continuidad. De hecho, esa dolencia lo dejó sin minutos en la eliminación ante Racing, un partido que él mismo buscó disputar, pero del que quedó al margen por la molestia lumbar que lo tuvo trabajando diferenciado.
Mientras el plantel encara su última semana de ejercicios antes de las vacaciones, el uruguayo continúa entrenando aparte y completará estos días sin ritmo normal junto al grupo. Una vez que llegue el viernes, comenzará un receso clave: tres semanas y algunos días que serán determinantes para definir cómo quiere y puede encarar su futuro inmediato.
La situación, según cuentan desde su entorno, es clara: Cavani quiere ponerse a punto y atravesar una pretemporada completa, algo que no pudo hacer este año en plenitud. Pero si su cuerpo no responde y la lesión persiste, ese es el escenario donde podría evaluarse una eventual salida mediante la cláusula.
Qué esperan Boca y Riquelme de Cavani para el 2026
Más allá de las dificultades, el optimismo sigue siendo el eje del vínculo. Juan Román Riquelme y la dirigencia mantienen la confianza en que el delantero puede recuperarse y tener un 2026 mucho más consistente. Ese deseo coincide con el del jugador, que se siente en deuda personal y deportiva, y que todavía conserva la motivación de ser importante en un año en el que Boca volverá al escenario internacional más exigente.
La postura hoy es compartida: la continuidad no se discute. La cláusula existe, pero no se toca. Solo se transformará en un tema si, luego de la pretemporada, el cuerpo de Cavani no tolera la exigencia. En ese caso, podría evaluarse un acuerdo maduro entre ambas partes.
¿Cómo fue el 2025 de Cavani en números?
El año del uruguayo dejó más dudas que certezas, y los números lo reflejan con claridad:
La estadística evidencia una temporada muy por debajo de las expectativas iniciales. No obstante, también muestra que, cuando estuvo disponible, Cavani intentó sostener un rol activo, aunque condicionado por su estado físico.
¿Cuándo se define realmente el futuro del delantero?
Toda resolución pasará por las primeras semanas de 2026. El delantero debe reincorporarse el 5 de enero, cuando Boca iniciará la pretemporada. Allí se sabrá si la recuperación fue efectiva, si puede sostener trabajos de alta intensidad y si está en condiciones de encarar un calendario que incluirá triple competencia.
Recién entonces, con datos médicos y respuesta física concreta, Boca y Cavani evaluarán si continúan el camino pactado o si deben activar la cláusula que hoy se presenta como una opción latente, pero no deseada.