El influencer también describió cómo cambia la rutina del lugar cuando el capitán de la Selección Argentina está presente. “Cuando viene Messi, a los delivery que entran les ponen un rastreador para que no vayan a la casa del chabón. También ponen inhibidores de drones. Doble seguridad. Es una paja”, expresó.
Sin embargo, el momento más llamativo de su relato fue el problema que tuvo con el astro rosarino. “Fui muy tonto porque en Navidad estaba Messi, yo salí de joda y después me llevaron unos chabones a mi casa. Cuestión, los chabones me dejaron en la puerta de mi casa y fueron directamente a las seis de la mañana a golpearle la puerta a Messi. Una multa de 400 mil pesos me pusieron”.
En estos casos, las reglas del barrio estipulan que los dueños de las propiedades son responsables por las personas que ingresan con su autorización, por lo que la sanción no pudo ser evitada y recayó directamente en Bolbao y su familia.
El incidente volvió a poner en el centro de atención la exposición que el influencer tiene en redes sociales, así como los desafíos de mantener la privacidad en un entorno donde Lionel Messi sigue siendo una figura de alcance mundial.