José Tasa: No mucho tiempo más. Puede ser que tomen mayores medidas en una o dos semanas. Obviamente serán más restricciones. Por lo pronto, dosificarán las divisas para los importadores. El sistema tiene filtraciones por donde se lo mire. Quieren hacer crecer la economía pero crecen al mismo tiempo las importaciones y no hay dólares para hacerlo. Los “economistas K” hablan de lo que ellos denominan “restricción externa”. Pero la restricción es querer que haya dólares al cambio oficial, cuando en paralelo emiten pesos a un ritmo de 250 mil millones por mes. Y cuando la brecha cambiaria es del 90%. Y cuando las expectativas es que sigan emitiendo fuerte en 2022. Espero que en enero y febrero cuando los precios salten no culpen a empresas o supermercados del aumento de precios. O si salta el dólar oficial no culpen a especuladores o bancos. Espero que tomen conciencia que fue por la exorbitante emisión de pesos que estuvieron haciendo.
Periodista: ¿Qué puede pasar con los bonos y las acciones?
José Tasa: Creo que ahí existen sensaciones encontradas. Por un lado se encuentra la desconfianza que generan los integrantes del nuevo gabinete entre los inversores pero del otro lado están las expectativas de que en pocas semanas el electorado vuelva a castigar al gobierno y el Congreso quede en manos de la oposición. Ello es una buena señal al mercado. De base, los precios de bonos y acciones más allá del rally pre PASO, siguen en niveles muy bajos. Piense que los bonos argentinos rinden casi 20%. Lo mismo las acciones. El camino para subas es muy largo. De corto plazo está claro que no habrá subas de magnitud. Le diría que apostaría a algunas bajas. Y me concentraría en mirar de cerca lo que puede pasar con las negociaciones con el FMI.
Periodista: ¿Y cómo ve lo que pueda pasar con el FMI?
José Tasa: Si antes creía que iban a ser negociaciones muy difíciles, ahora no sé qué palabras pueden graficar esos contactos que se avecinan. Innecesariamente el gobierno dejó pasar mucho tiempo. Deberían haber cerrado un acuerdo en el primer trimestre del 2021 junto a la renegociación de la deuda. O bien deberían haberlo hecho durante la pandemia, cuando todos los organismos internacionales estaban dulces. Pero ni Cristina ni Guzmán quisieron avanzar seriamente en un entendimiento y se concentraron en buscar que el FMI les baje la tasa de los créditos. Y los tiempos ahora se agotan. Este miércoles se le deben pagar al FMI u$s 1.800 millones. ¿Será el último pago antes de un default? El próximo vencimiento con el FMI es el 22 de diciembre, por el mismo monto. Ahora yo hago la pregunta en esta ocasión. Imaginemos que se repite el resultado de las elecciones PASO y que se encaran negociaciones difíciles con el FMI desde mediados de noviembre en adelante. Si esas negociaciones están complicadas, es decir, el staff del FMI pide reducir el gasto público, la brecha cambiaria, y la emisión de pesos. Cristina lo rechaza. ¿Usted está seguro de que el gobierno hará el pago al FMI del 22 de diciembre?
Periodista: La verdad es que no estaría muy seguro de que lo hagan.
José Tasa: Tampoco yo. Por ello es que sería muy cauteloso con lo que respecta a bonos y acciones. Las elecciones pueden dar una luz de esperanza de que el país se encamine a políticas económicas más serias pero en el interín puede haber sorpresas negativas. Fíjese lo que hicieron con los DEG o ayuda que recibieron del FMI por la pandemia. Lo vuelcan a aumento del gasto público y a asegurarse mayor emisión de pesos desde el BCRA. Es tiempo de cautela.