Luego del ataque masivo de Irán sobre Israel, la “Cúpula de Hierro” se volvió a activar y a responder. Este sistema es crucial para proteger a la población de los ataques con cohetes porque anticipa a los misiles antes que lleguen a su objetivo.
Este es un pilar del sistema de defensa israelí y utiliza un radar avanzado para detectar y rastrear proyectiles que ingresan a su territorio, que son destruidos en el aire con misiles TAMIR.
Luego del ataque masivo de Irán sobre Israel, la “Cúpula de Hierro” se volvió a activar y a responder. Este sistema es crucial para proteger a la población de los ataques con cohetes porque anticipa a los misiles antes que lleguen a su objetivo.
El Domo de Hierro, o Iron Dome, es un pilar en la defensa israelí y utiliza un radar avanzado para detectar y rastrear proyectiles entrantes. Esos cohetes son destruidos en el aire con misiles TAMIR, diseñados específicamente para este fin.
El sistema es coordinado por un software especializado que usa algoritmos complejos para la toma de decisiones y transmite datos en tiempo real. Este proceso sofisticado es vital para el funcionamiento del sistema.
En la jornada de hoy gran parte de los misiles lanzados por Irán fueron neutralizados, pero se calcula que más de 550 misiles cayeron en territorio israelí y muchos terminaron impactando en distintas zonas de país.
El Iron Dome no frena todos los misiles, ya que su interceptor sólo dispara si el cohete entrante va a caer sobre infraestructuras importantes o áreas pobladas. Los proyectiles de menor tamaño y alcance, y los que se dirigen hacia zonas despobladas, pueden dejarse pasar.
Detener cada misil es muy costoso. De acuerdo con Jerusalem Post, a Hamás le cuesta de u$s300 a u$s800 crear cada cohete, mientras tanto, Israel destina aproximadamente u$s40.000 en interceptarlos.
Los ataques recientes demostraron que el Iron Dome tiene un punto de saturación, aunque en el pasado el sistema interceptó proyectiles con éxito, el reciente ataque logró colapsarlo, aunque respondió positivamente.
El portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, había advertido antes que la información de inteligencia compartida por los Estados Unidos advertía que el ataque con misiles desde Irán era inminente. En una conferencia de prensa, Hagari puntualizó que Israel se encontraba en un estado de "máxima preparación" y haciendo arreglos para el posible ataque con la ayuda de las fuerzas estadounidenses en la región.