Juventud eterna

La historia del multimillonario que busca la juventud eterna en base a inyectarse sangre de su hijo

Gasta 2 millones de dólares en un tratamiento de comidas, suplementos, ejercicio y transfusiones de sangre. Tiene 45 años y desea mantenerse como un joven de 17, la edad de su hijo.
Roberto Adrián Maidana
por Roberto Adrián Maidana |
Bryan Richardson junto a su hijo y a su padre. El magnate del software utiliza la transfusión de sangre para conseguir la vida eterna. (Foto: Gentileza Bloomberg) 

Bryan Richardson junto a su hijo y a su padre. El magnate del software utiliza la transfusión de sangre para conseguir la vida eterna. (Foto: Gentileza Bloomberg) 

Gasta 2 millones de dólares por año para conseguir la juventud eterna. Es un método muy caro que no parece estar al alcance de todos. Pero eso a Bryan Richardson no le preocupa. Es multimillonario gracias a la industria del software, pero su obsesión es la juventud eterna.

Tiene 45 años y quiere conservar tanto su cuerpo como con su cerebro tal como si fuera su hijo Talmage, de sólo 17 años. Para eso, tiene un recurso clave: transfusiones de sangre.

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Es el toque final para una rutina inflexible que incluye horarios inamovibles para dormir y para despertarse, una hora diaria de ejercicios, comida vegana y suplementos de más de 50 tipos.

Pero lo más importante es el intercambio de sangre que realiza no solo con su hijo. También involucró a su padre, Richard, quien tiene 71 años. Todo para asegurar que su envejecimiento se retarde.

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La sangre, ¿clave para la juventud eterna?

Gracias a los ingresos extraordinarios que tiene anualmente por su empresa de software y obsesionado por no envejecer, Bryan, a sus 45 años emplea gran parte de su tiempo en luchar contra el paso de la edad. Hace tiempo que cumple con un muy riguroso programa para cuidar su cuerpo, que comprende:

  • 1 hora diaria de ejercicio
  • alimento cuidadosamente elaborado por nutricionistas veganos
  • 40 suplementos energéticos
  • Respetar el tiempo de descanso, la hora de acostarse y la de despertarse.

Pero sus contactos con los médicos y bioespecialistas lo llevaron a estudiar qué pasa con la sangre para saber si tiene algún tipo de vinculación con el deterioro celular, del cuerpo, los tejidos, órganos, huesos y el cerebro.

Un estudio sobre ratas despertó su interés. Se les cosieron la boca para que compartieran un mismo sistema digestivo. Las ratas tenían diferentes edades. Al compartir el alimento y aplicarle el plasma de la más jóven a la más adulta observaron algo revelador: las heces dela adulta eran iguales a la de la otra. Había "rejuvenecido".

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Bryan utiliza 2 millones de dólares por año en búsqueda de la eterna juventud. (Foto: Captura de TV)

Bryan utiliza 2 millones de dólares por año en búsqueda de la eterna juventud. (Foto: Captura de TV)

2 millones de dólares al año para ser "inmortal"

Por eso, destina esa fortuna anualmente para investigar nuevas técnicas que detengan o retrasen el envejecimiento. La última técnica que aplica es un experimento multifamiliar. Requiere el esfuerzo conjunto de tres generaciones de los Johnson: el millonario Bryan (45 años), su padre Richard (71) y su hijo Talmage (17).

Cada un tiempo regular, extraen la sangre de Bryan y de Talmage. Separan el plasma de los glóbulos rojos de la sangre y cada generación más adulta recibe la transfusión de la más joven.

Creen que el hecho de recibir plasma de una persona más jóven ayuda a recuperar todo el sistema metabólico de las personas de más edad.

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Las tres generaciones de Johnson, comparten ejercicios luego de recibir la transfusión generacional de sangre. (Foto: Captura de TV)

Las tres generaciones de Johnson, comparten ejercicios luego de recibir la transfusión generacional de sangre. (Foto: Captura de TV)

Cada vez que realizan el tratamiento comparten unos días de internación para un completo estudio. Bryan, de 45 quiere tener el mismo vigor y juventud de su hijo de 17. Y de paso, ayudar a su padre a retardar el paso del tiempo.

Su cuerpo parece más joven que el de una persona de 45 años. Pero todavía es muy prematuro para determinar si es por su dieta, ejercicio y ritmo de vida o si, efectivamente, en la sangre y el plasma está el elixir de la inmortalidad. Drácula, algo sabía de eso, ya que le permitió vivir durante siglos.

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