En ese contexto, Bolsonaro dijo que Lula "está en contra del voto democrático" por no apoyarlo en el pedido de cambio del sistema electoral con urna electrónica que rige desde 1996 y que permitió la elección del jefe del Estado y de sus tres hijos.
"Los mismos que sacaron a Lula de la cárcel van a contar los votos y por eso están en contra del voto electrónico controlado por el voto de papel", afirmó el mandatario, que adelantó que el jueves mostrará casos de fraude de la elección de 2014.
Bolsonaro dijo también que "hace dos años no hay corrupción en Brasil", aunque admitió que está "siendo acusado" de este delito por la Policía Federal "por una vacuna que no fue comprada".
El mandatario lanzó acusaciones desde la semana pasada a todo el arco político opositor mientras avanza la investigación en su contra sobre prevaricato en un contrato fraudulento que finalmente no prosperó para adquirir, mediante intermediarios del Ministerio de Salud, la vacuna Covaxin, un escándalo que involucra a funcionarios que son militares.
Bolsonaro dijo que puede caminar por el país mientras que Lula "no puede salir a tomar un trago a un bar porque es insultado y dicen que tiene el 49% de intención de voto".