El caso sacude a la provincia de Córdoba y mantiene en vilo a todo el país. En cuestión de horas, una historia de violencia de género derivó en un doble crimen atroz y en la desaparición de un niño de apenas cinco años.
La Justicia de Córdoba lanzó el alerta para dar con el paradero de Pedro Teodoro Rodríguez Laurta, que fue secuestrado luego del brutal asesinato de su madre y su abuela. El principal sospechoso es Pablo Laurta, padre del menor.
El caso sacude a la provincia de Córdoba y mantiene en vilo a todo el país. En cuestión de horas, una historia de violencia de género derivó en un doble crimen atroz y en la desaparición de un niño de apenas cinco años.
La Fiscalía de Instrucción de Violencia Familiar y de Género del 2º Turno, a cargo de la investigación, activó de inmediato la Alerta Sofía, un protocolo nacional que se aplica en situaciones de riesgo extremo para menores. También se emitió un pedido de captura internacional a Interpol para localizar al presunto homicida y recuperar al niño con vida.
Las víctimas fueron identificadas como Luna Giardina (29) y Mariel Zamudio (55), madre e hija. Ambas fueron encontradas sin vida dentro de su vivienda, ubicada sobre la calle San Pedro de Toyos, en el barrio Villa Serrana (Villa Rivera Indarte), al norte de la capital cordobesa.
Según los primeros informes policiales, Pablo Laurta habría irrumpido en la casa de su expareja durante la mañana del sábado. Los vecinos escucharon gritos y detonaciones de arma de fuego, y minutos después vieron salir al sospechoso con el niño Pedro en brazos y una mochila, antes de escapar en un vehículo.
Cuando la policía llegó al lugar, se encontró con una escena estremecedora: Luna y Mariel yacían sin vida, con múltiples heridas de bala. Las pericias confirmaron que el arma homicida fue una pistola 9 mm, hallada en las inmediaciones del domicilio.
El fiscal a cargo dispuso un amplio operativo de búsqueda nacional e internacional, ante la sospecha de que el acusado intente cruzar la frontera hacia Uruguay.
El eje central de la investigación ahora es encontrar con vida a Pedro Teodoro Rodríguez Laurta, el hijo de Luna y Pablo. El niño, de apenas 5 años, fue sustraído del domicilio familiar inmediatamente después del crimen.
La foto del menor fue difundida por las fuerzas de seguridad junto con los datos de su padre, quien es considerado armado y extremadamente peligroso.
Desde el Ministerio Público Fiscal de Córdoba se pidió colaboración ciudadana y se solicitó que cualquier información sea reportada al 911 o a la unidad judicial más cercana.
“Cada minuto cuenta. La prioridad es rescatar a Pedro antes de que su padre logre salir del país”, señaló un investigador del caso.
Interpol Uruguay ya fue notificada y colabora con la Policía Federal Argentina y la Gendarmería Nacional en los puntos fronterizos. El operativo se extendió a terminales, aeropuertos y pasos internacionales, especialmente en la zona de Salto, Paysandú y Fray Bentos.
La tragedia no fue un hecho aislado. Fuentes judiciales confirmaron que Luna Giardina había huido de Uruguay junto a su hijo hace casi tres años, tras denunciar a su expareja por intento de femicidio.
En aquella ocasión, Laurta habría intentado ahorcarla, motivo por el cual la mujer logró escapar y radicarse en Córdoba bajo una medida de protección.
Pese a las denuncias reiteradas por violencia de género, el agresor logró rastrear su paradero y, según los investigadores, planificó el ataque con antelación.
Luna contaba con un botón antipánico, pero no llegó a activarlo al momento del crimen. Las autoridades confirmaron además que el acusado tenía antecedentes de hostigamiento y amenazas.
“Era una mujer joven que intentaba rehacer su vida con su hijo. Hizo todo lo posible para protegerlo, pero la justicia no llegó a tiempo”, lamentó una amiga de la víctima.
El principal acusado, Pablo Laurta (36), es de nacionalidad uruguaya y expareja de Luna Giardina. Fuentes policiales lo describen como un hombre con un perfil manipulador, celoso y violento.
En redes sociales, mantenía actividad frecuente en grupos vinculados a discursos de odio y movimientos antifeministas, entre ellos una página denominada “Varones Unidos”, que promueve mensajes misóginos y teorías conspirativas contra el feminismo.
Los investigadores creen que Laurta habría preparado la emboscada durante varios días, vigilando los movimientos de su expareja.
Tras ejecutar el crimen, se llevó a Pedro y huyó en un auto color gris, del cual ya se difundieron imágenes captadas por cámaras de seguridad.
“No tenemos dudas de que se trata de un femicidio seguido de un doble homicidio agravado. Y de una sustracción de menor con fines de fuga”, sostuvo una fuente del Ministerio de Seguridad provincial.
La Fiscalía de Violencia Familiar y de Género del 2º Turno, a cargo de la doctora Eugenia Pérez Moreno, coordina la investigación junto con la División Homicidios y la Dirección de Investigación Operativa (DIO) de la Policía de Córdoba.
Desde el sábado por la tarde se montó un comando de emergencia con personal especializado en búsqueda de personas.
El caso también fue informado a la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX), dado que no se descarta ninguna hipótesis sobre el destino del menor.
“Estamos en contacto con todas las fuerzas nacionales e internacionales. Es una carrera contra el tiempo”, aseguró Pérez Moreno.
La alerta internacional fue extendida a Interpol Montevideo y Brasilia, ante la posibilidad de que el sospechoso intente utilizar rutas alternativas para salir del país.