La madre de Catalina Gutiérrez, la joven de 21 años asesinada en la ciudad de Córdoba, se expresó ante los jurados tras la lectura de los alegatos y manifestó su dolor frente a Néstor Aguilar Soto: "Mi hija está en un cajón por culpa tuya".
La madre de la víctima se dirigió al acusado en la última audiencia del proceso judicial por el femicidio de la joven cordobesa y le dejo un mensaje.
La madre de Catalina Gutiérrez, la joven de 21 años asesinada en la ciudad de Córdoba, se expresó ante los jurados tras la lectura de los alegatos y manifestó su dolor frente a Néstor Aguilar Soto: "Mi hija está en un cajón por culpa tuya".
Se trata de Eleonora Vollenweider, quien estuvo acompañada de su esposo Marcelo Gutiérrez y mientras sostenía su mano. La mujer señaló: "Néstor no solo mataste a Catalina, me mataste a mí, a Marcelo y a Lucía. Mataste proyectos y futuro".
"Vos como nadie conocías a Catalina, sabías lo que te quería", consignó entre lágrimas.
En este sentido, la madre de la víctima sostuvo que "ahora le sobra un lugar en la mesa, una cama, un lugar en el auto y todo el amor que tenía para darle a su hija", al tiempo que añadió: "La extraño y su ausencia es durísima".
Por su parte, le pidió a Soto que la mire a la cara, pero el acusado mantuvo su rostro hacia abajo: "Me gustaría que me miraras, Néstor, mirame".
"Te escucho decir que estás en una celda, que tu vida era perfecta… ¿sabés dónde está Catalina? en un cajón. Ahí está mi hija por culpa tuya", arremetió Eleonora.
Luego, el oriundo de San Carlos de Bariloche tuvo la posibilidad de expresar sus últimas palabras, pero se negó.
Néstor Soto fue condenado este miércoles a prisión perpetua por el femicidio de Catalina Gutiérrez, asesinada el 17 de julio de 2024 en la ciudad de Córdoba. La sentencia fue dictada por los jueces Susana Frascaroli, Horacio Carranza y María Gabriela Rojas Moresi, del Tribunal II, tras el veredicto emitido por un jurado popular.
Soto, de 22 años y oriundo de Bariloche, había llegado a juicio imputado por homicidio calificado por violencia de género y criminis causa, es decir, matar para ocultar otro delito.
Durante el juicio, el fiscal Marcelo Sicardi sostuvo que el acusado mató a Catalina para encubrir las agresiones previas y calificó el crimen como un femicidio. Soto había confesado el asesinato, pero negó que se tratara de un crimen de género. “Yo soy un homicida, pero quiero defenderme: no soy un femicida”, declaró durante la audiencia.