“Hubo contradicciones en cuanto a la mecánica del hecho y a la existencia del consentimiento” y señalaron que se deben seguir investigando los hechos, pero sostienen que en las pruebas obtenidas hasta el momento “no hay méritos para una prisión preventiva”, sostuvo la fiscalía.
Jegou y Auradou seguirán imputados por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos o más personas, y van camino al procesamiento.
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En el dictamen, al que accedió El Sol de Mendoza, la fiscalía destacó “la existencia de notorias contradicciones, inconsistencias, zonas grises y hasta explicaciones insuficientes” respecto de la denuncia.
En tal sentido, entre esas “contradicciones” se mencionan “el motivo o la intención perseguida por la propia denunciante al acceder a ir al hotel, y una vez en el mismo la dinámica exteriorizada en forma previa al ingreso a la habitación” y “la secuencia témporo-fáctica de los abusos sexuales denunciados”.
Asimismo, consideraron “la conducta observada por la denunciante al momento de salir de la habitación y hacer abandono del hotel”, “el tono jocoso que caracteriza el inicio de la conversación con su amiga en horas de la tarde del día de los hechos denunciados” y “las precisiones en cuanto a la entidad y causa de las lesiones oportunamente denunciadas”.
“La primera versión arrimada por la denunciante se ha visto debilitada con los diversos elementos probatorios que han sido agregados a la causa”, indicó la resolución. Y resaltó “una serie de contradicciones en cuanto a la mecánica del hecho y a la existencia del consentimiento que resultan de relevancia”.