Los esfuerzos por rescatar a las víctimas del derrumbe del Apart Hotel Dubrovnik en Villa Gesell han avanzado significativamente en las últimas horas, con el hallazgo de siete personas que estaban atrapadas entre los escombros.
Los esfuerzos por rescatar a las víctimas del derrumbe del Apart Hotel Dubrovnik en Villa Gesell han avanzado significativamente en las últimas horas, con el hallazgo de siete personas que estaban atrapadas entre los escombros. Sin embargo, la situación sigue siendo crítica ya que aún falta encontrar a Dana Desimone, la última persona desaparecida entre las ocho víctimas que estaban dentro del edificio en el momento de la tragedia.
Este trágico evento ha sacudido profundamente a la comunidad de Villa Gesell y ha movilizado a equipos de rescatistas que, sin descanso, trabajan en la remoción de escombros y en la búsqueda de sobrevivientes. Las autoridades locales confirmaron el hallazgo de varios trabajadores del complejo, incluyendo a Javier Gutiérrez, carpintero de 54 años, y dos plomeros: Matías Chapsman, de 28, y Mariano Troiano, de 47 años. Además, se informó sobre el descubrimiento del cuerpo de Ezequiel Matu, de 38 años, quien también formaba parte del personal del lugar. Todos ellos fueron encontrados en una misma zona del hotel, sin vida.
Dana Desimone, de 28 años, es la única persona que aún no ha sido encontrada tras el colapso del Apart Hotel Dubrovnik. Esta joven, que se había mudado a Villa Gesell tras haber crecido en Lomas de Zamora, había lanzado con mucho esfuerzo un emprendimiento de pastelería llamado Lucky, que se había convertido en su pasión y su proyecto de vida. Dana trabajaba junto a su pareja, Nahuel Stefanic, sobrino de la exdueña del complejo, María Rosa Stefanic, lo que la vinculaba estrechamente al lugar que terminó siendo escenario de una tragedia.
La comunidad la conocía no solo por su talento y dedicación a la pastelería, sino también por su carácter afable y su amor por lo que hacía. La noticia de su desaparición ha conmovido tanto a sus allegados como a los habitantes de Villa Gesell, que siguen con atención y esperanza los reportes de los equipos de rescate.
El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, ha sido una de las principales voces informativas durante las labores de rescate. Recientemente, Alonso confirmó que los rescatistas lograron llegar a la zona de las habitaciones, donde se esperaba encontrar a Dana. “Llegamos a la habitación y a todo ese segmento, pero no la encontramos”, explicó Alonso, indicando que el lugar fue minuciosamente revisado sin resultados positivos.
Ante esta situación, los equipos de rescate han reorientado su búsqueda. Ahora, el foco se ha trasladado hacia las áreas de salida de las habitaciones, en los pasillos y otras zonas aledañas. “Estamos trabajando en la salida de las habitaciones que dan a los pasillos”, detalló Alonso. Esta hipótesis se basa en la posibilidad de que Dana hubiera intentado desplazarse a otro lugar del hotel en el momento en que se produjo el derrumbe, lo que complicaría su localización exacta.
El derrumbe del Apart Hotel Dubrovnik ha tenido un profundo impacto en la ciudad costera de Villa Gesell, un destino turístico popular conocido por sus playas y su ambiente relajado. Las imágenes del edificio parcialmente colapsado, con equipos de rescate y maquinaria pesada trabajando incansablemente, son un recordatorio de la fragilidad de las construcciones y la importancia de los estándares de seguridad.
La búsqueda de Dana Desimone ha sido especialmente desafiante debido a la magnitud de los daños y la disposición del hotel. Las estructuras colapsadas, sumadas a los escombros pesados y la posible inestabilidad de lo que queda en pie, han complicado las labores de rescate. A pesar de esto, el equipo de rescatistas, compuesto por bomberos, personal de Defensa Civil y especialistas en emergencias, no ha cesado en su compromiso por encontrarla.
El dolor de los familiares y amigos de las víctimas se ha visto reflejado en los mensajes y testimonios compartidos por quienes conocían a los afectados. Las redes sociales han sido un espacio donde los recuerdos y las palabras de aliento han fluido. Nahuel Stefanic, pareja de Dana y uno de los más afectados por la tragedia, ha mantenido la esperanza en medio del dolor. La relación de ambos, fortalecida por el amor y su proyecto en común, representa un símbolo de los sueños que quedaron truncos en medio de los escombros.
“Ella era una persona increíble, siempre sonriente y llena de vida”, comentó uno de sus amigos más cercanos. Este sentimiento es compartido por todos los que tuvieron la oportunidad de conocer a Dana, cuya pasión por la pastelería era conocida en la comunidad y había logrado ganarse el cariño de muchos.
Mientras los rescatistas continúan su ardua tarea, la comunidad de Villa Gesell y los familiares de Dana Desimone mantienen la esperanza de recibir noticias positivas. Las labores en situaciones de emergencia como esta no solo exigen destreza y coordinación, sino también una resiliencia inquebrantable tanto por parte de los equipos de rescate como de aquellos que esperan noticias al borde del colapso emocional.
La búsqueda de Dana se ha convertido en un símbolo de la lucha por la vida y la perseverancia frente a la adversidad. Cada día que pasa, cada paso que se da entre los escombros, es una muestra del compromiso y la humanidad que mueven a los rescatistas a seguir adelante, a pesar del cansancio y la dificultad.
