Sobre el informe preliminar de autopsia, al que tuvo acceso Télam, los voceros detallaron que Charrutte presentaba un "orificio redondeado con halo de contusión interciliar compatible con orificio de entrada de proyectil de arma de fuego, incautándose el elemento productor alojado en cuero cabelludo el cual resulta ser proyectil calibre .380 apto para futuro cotejo".
La autopsia agregó que el fallecimiento fue a raíz de un "sangrado intracraneal producido por herida de proyectil de arma de fuego en cráneo".
La titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 descentralizada de Ituzaingó, María Laura Cristini, trabajaba junto con la policía de la zona en la identificación de los homicidas, aunque esta tarde se determinó que unas huellas levantadas de la moto involucrada en el hecho no son aptas para cotejo.
Por ello, los pesquisas se centraban en el análisis de las imágenes de las cámaras de seguridad que registraron distintas secuencias de lo ocurrido para tratar de obtener pistas sobre los asesinos, al tiempo que aguardan para las próximas horas los resultados de otros peritajes.
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Muestras de dolor en el cementerio de Morón. (Foto: Télam)
El mecánico salió a recuperar la moto del kiosquero cuando lo mataron
El hecho sucedió después de las 21 del martes en la intersección de las calles Caaguazú 2500, casi esquina Bertole, de Ituzaingó sur cuando Charrutte estaba en su taller mecánico que comparte con un amigo cuando ambos fueron testigos de cómo dos delincuentes armados robaron la moto a un kiosquero de la cuadra.
Los asaltantes, según los testigos, no lograron hacer arrancar la Gilera blanca que le habían sustraído al comerciante y comenzaron a llevarla a pie, secuencia que quedó grabada por una cámara de seguridad, donde se puede ver al mecánico salir armado a perseguir a los ladrones.
Instantes después, Charrutte y su socio se montaron a su moto Corven Triax de 150 cilindradas y salieron a perseguir a los ladrones con la intención de recuperar el vehículo que le habían robado al kiosquero.
Cuando los asaltantes advirtieron esta situación, dejaron tirada la moto robada y se escondieron atrás de un árbol para comenzar a dispararles a las personas que los querían atrapar.
Así fue como el mecánico Charrutte recibió un balazo en la cabeza, a la altura del ojo izquierdo, que lo tumbó y le provocó la muerte en el lugar.