Fernández encabezó por videoconferencia la Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur y el traspaso de la Presidencia Pro Témpore a Brasil.
En el encuentro participaron los presidentes de Brasil, Jair Bolsonaro; de Paraguay, Miguel Abdo Benítez y de la República Oriental del Uruguay, Luis Lacalle Pou, todos países miembros del bloque regional, y los mandatarios de los Estados asociados: como el chileno Sebastián Piñera; y el de Ecuador, Guillermo Lasso; el de la República Cooperativa de Guyana, Irfaan Ali.
Además, en representación del estado Plurinacional de Bolivia estuvo el vicepresidente David Choquehuanca; y por Colombia, la directora de Mecanismo de Concertación e Integración, Adela Maestre.
Junto a Alberto Fernández estuvieron el canciller, Felipe Solá, y el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
Unidad en el Mercosur ante un mundo más agresivo
El Presidente también apuntó a la necesidad de una revisión del Arancel Externo Común que contemple "a los sectores más sensibles" y buscar acuerdos para impulsar a los sectores productivos del Mercosur "ante un mundo más proteccionista y fundamentalmente más agresivo".
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"Solos alimentaremos el espejismo de una vana prosperidad. Unidos podemos consolidar un Mercosur creativo, que avanza de la mano de sus pueblos y no se corta solo, imponiendo visiones unilaterales", afirmó en su discurso.
El camino, consideró Alberto Fernández, es cumplir con el Tratado de Asunción "negociar juntos con terceros países o bloques y respetar la figura del consenso. Creemos en la defensa del estado de derecho, todos somos parte de estados de derecho; el consenso es el camino más racional", sostuvo.
"Tenemos la responsabilidad histórica de fortalecer al Mercosur frente a la crisis de Covid-19", dijo Alberto Fernández a sus pares del bloque económico.
Y agregó: "Necesitamos un Mercosur productivo, que tome la voz de los que no tienen voz", con "más integración regional para producir, negociar y competir en mejores condiciones".
"No hay Mercosur sin pueblos ni un oído atento al mundo social. La integración es una palabra hueca si no se hace eco de drama de la pobreza", aseguró Alberto Fernández.