Interna en Juntos por el Cambio

Interna PRO: en el larretismo descuentan que Jorge Macri se baja de la pelea bonaerense: ¿qué faltaría para acordar?

Este martes habra una reunión clave. Cerca de Jorge Macri insisten con una condición para bajarse que es inaceptable para Larreta.
Gonzalo Prado
por Gonzalo Prado |
Con los colores PRO. Pasacalle de la campaña electoral de Jorge Macri en la Provincia.

Con los colores PRO. Pasacalle de la campaña electoral de Jorge Macri en la Provincia.

Son horas de definiciones en el PRO, luego del acuerdo que encumbró a María Eugenia Vidal como candidata a diputada por la Ciudad de Buenos Aires. Ahora, llega el momento de las definiciones bonaerenses.

Este martes habrá una reunión de Juntos por el Cambio para definir el piso y las formas de la interna. Ese será el primer encuentro para acordar las reglas comunes y servirá de antesala para la charla final. El jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, y el intendente de Vicente López, Jorge Macri, darán por finalizado el “cuarto intermedio” entre ambos que rige desde la semana pasada para volver a sentarse cara a cara para determinar qué sucederá.

Ambos coinciden en que una interna en el PRO para competir contra el candidato de la Unión Cívica Radical (UCR), Facundo Manes, puede terminar en una derrota. La matemática es simple, los votos de un espacio se dividirán en dos mientras los otros no.

Pero que las posiciones estén más cerca no quiere decir que haya un acuerdo. Macri ya le dejó entrever a sus más cercanos que baraja bajarse de su candidatura. “Pero si hace lo mismo Santilli (por el vicejefe de Gobierno”. A la mesa de negociaciones planteará que ambos se encolumnen detrás de Manes. Algo que por ahora distan de ver cerca de Rodríguez Larreta.

“Es la gran solución y nos garantiza una victoria en la provincia de Buenos Aires”, remarcó uno de los armadores que tiene Jorge Macri. “Si en la Ciudad hicieron un esfuerzo extraordinario, que se haga también en la provincia”, replican.

Quienes defienden esta tesitura sostienen que en las encuestas que están llegando Manes se encuentra con mayor intención de voto en la segunda, cuarta, quinta, sexta y séptima sección electoral, mientras que el vicejefe de Gobierno está primero en la primera, la tercera y la octava.

Santilli por su parte, tiene una visión. Amparado en el apoyo de la mayoría de los intendentes del PRO, buscará encontrar la forma de convencer al jefe comunal de Vicente López de que desista de su candidatura.

“Se va a terminar bajando, el punto es cuánto va a costar eso. Ahí entran en juego otros actores que son los que tienen que ceder. No tanto nosotros”, remarcó uno de los integrantes de la mesa chica del vicejefe de Gobierno que tiene pensando mantener la forma de campaña que llevó adelante hasta ahora con bajadas a los distritos más cercanos a la Ciudad y con el apoyo de los jefes comunales del PRO.

Alguien tiene que ceder

La mención a los “otros” que tienen que ceder no es hacia Macri, sino hacia Vidal y los intendentes que tiene hoy en día el PRO. Pero también los dirigentes del radicalismo que juegan en tandém con la ex gobernadora. El presidente de la filial provincial, el diputado provincial Maximiliano Abad es “la espada legislativa” que tiene la ex mandataria provincial.

Para llegar a un acuerdo de unidad con Macri, tendrán que bajar algunas aspiraciones en cuanto a lugares para las dos listas (la nacional y la provincial) en pos de que alcance para todos dentro del PRO. Es el primer paso para avanzar con el otro escollo que tiene hoy por el hoy ese partido: la fiscalización.

Es que en la zona del AMBA, el poder de fuego para tener fiscales en la interna es grande como consecuencia del peso de los intendentes. Fuera de esos centros se cuenta solamente Mar del Plata, Pinamar, Bahia Blanca y Olavarria. Poco en comparación con el aparato que ya tienen la UCR.

El juego de los radicales

Mientras tanto, en la UCR se mantienen expectantes. El objetivo pasará por que el piso que defina la lista electoral tenga relación con el que se estipuló para la Ciudad. Ya todos en el entorno de Manes saben que esta elección para él es un trampolín. Su objetivo es disputar la Presidencia en 2023. Esa es la única meta que tiene en su mente.

Por fuera de la disputa en el PRO, una de las cuestiones también troncales es el rol que tendrá dentro de este esquema el ex presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó. Por estas horas, todo indica que estaría como el tercero en esa lista. Aunque resta ver todo lo que sucederá de acá al cierre de listas el 24 de julio.

Desde el 2019, Monzó junto al exministro de Interior, Rogelio Frigerio, (que será candidato a senador nacional por la provincia de Entre Ríos aunque tenga que ir a una interna en Juntos por el Cambio) estableció un acuerdo con Rodríguez Larreta de “socios, pero no empleados”. Hubo varios sondeos de parte de Uspallata con Monzó, según pudo reconstruir este medio, pero el lugar que más le terminó cerrando fue con Manes. Siempre dentro de Juntos por el Cambio.

Poco a poco también comienza a haber un consenso: la necesidad de mantener el control del Senado provincial. Tal y como están las cuentas, el gobernador Axel Kicillof necesita solamente tres votos más para terminar con la mayoría que ostenta Juntos por el Cambio. Si eso se modifica, el oficialismo podría remover el Procurador, Julio Conte Grand, y hasta cambiar la composición de los miembros de la Suprema Corte.