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Internas palaciegas: ¿Sabía Macri que se iba a firmar el protocolo por el aborto no punible?

Stella Gárnica / a24.com
por Stella Gárnica / a24.com |
Internas palaciegas: ¿Sabía Macri que se iba a firmar el protocolo por el aborto no punible?

¿Cómo controla el Presidente que sus ministros y secretarios no tomen medidas contrarias al pensamiento y objetivos del Gobierno? Esa es la cuestión. Finalmente, Mauricio Macri decidió anular el protocolo por el aborto no punible publicado el miércoles en el Boletín Oficial por el secretario de Salud, Rodolfo Rubinstein, "sin consultar" con el jefe de Estado ni a su jefa directa, la ministra de Desarrollo Social y Salud, Carolina Stanley.

En la Casa Rosada ya se vive un clima de duras internas palaciegas a días de entregar el poder. Macri informó oficialmente la decisión de revocación durante la reunión de Gabinete este jueves. El tema divide las aguas en el gabinete, aunque todos acuerdan que la decisión de la resolución la tomó en soledad el secretario de Salud, de origen radical, Adolfo Rubinstein.

Según confirmó primero Stanley y posteriormente Alejandro Finocchiaro ante una consulta de A24.com, Macri ordenó en la reunión de Gabinete realizada este jueves, la redacción de una norma revocatoria que será publicada mañana viernes en el Boletín Oficial.

Sin embargo, Finocchiaro dijo que "no se le pidió la renuncia" al funcionario, argumentando que la revocatoria no es por la cuestión de fondo -el contenido que establece el protocolo- sino por la forma en que fue publicado, sin consultas ni debate".

El tema fue eje central en la reunión de Gabinete, en la que Macri dijo que "por la sensibilidad que genera el tema" del aborto, pese al papelón en que quedó inmerso el final de su gestión, "la revocatoria es la única salida porque no se puede tomar una decisión en un tema tan sensible como el aborto, durante la transición, a días de terminar una gestión".

La nueva marcha atrás del gobierno de Macri podría tener la forma de otra resolución o un decreto para anular la resolución 3158/2019 que entró en vigencia desde el miércoles 20 a partir de su publicación el pasado miércoles por Rubinstein.

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Internas palaciegas:

“Rubinstein firmó la resolución y la mandó a publicar al Boletín Oficial sin consultar al Presidente ni a ninguno de los ministros. No se le pidió la renuncia, pero Marcos Peña lo citó el miércoles para pedirle explicaciones”. “Rubinstein firmó la resolución y la mandó a publicar al Boletín Oficial sin consultar al Presidente ni a ninguno de los ministros. No se le pidió la renuncia, pero Marcos Peña lo citó el miércoles para pedirle explicaciones”.

Alejandro Finocchiaro a A24.com

Sin embargo, en off the récord, el clima de internas palaciegas que se vivió entre el radicalismo y el macrismo en los 4 años de gestión, parecía profundizarse por el debate sobre la legalización del aborto. Con esta derogación, pasará a un debate para el próximo Gobierno que encontrará a la alianza Cambiemos como oposición en el Congreso.

Así explicó lo que sucedió con el "protocolo por la Interrupción legal del Embarazo (ILE) un ministro que participó de la reunión de Gabinete al ser consultado sobre cómo se desarrolló el escándalo en que derivó lo que podría considerarse a esta altura una “interna palaciega”.

“Rubinstein se cortó solo, ni el presidente Macri ni ningún ministro sabía de la resolución sobre el protocolo por el aborto legal, y el encargado del Boletín Oficial no suele controlar el contenido de las normas, sino que se fija solo que cumplan las normas legales”.

¿Por qué Macri no le pidió la renuncia a Rubinstein si el secretario pasó por encima de la ministra del área y del propio Presidente?

Es la pregunta que oficialmente el Gobierno evita responder. En voz baja algunos funcionarios atribuyen a la necesidad de mantener unida con sus diferencias internas y su "pluralismo", a la coalición Cambiemos después del 10 de diciembre, cuando pase a ser oposición.

Justamente el debate por la legalización del aborto es un tema que atraviesa y divide transversalmente no solo a Cambiemos sino a todas las fuerzas políticas, como se vio en el debate parlamentario el año pasado.

Otros, atribuyen a un "pase de facturas del radicalismo" la actitud de Rubinstein, que el mismo 19 de noviembre firmó pero publicó un día después, una segunda resolución que incluye otro tema muy conflictivo socialmente y que también tiene fuerte rechazo de la Iglesia, como es la inclusión en el Programa Médico Obligatorio de Salud el tratamiento hormonal para cambio de género (sexo). Algo, que aclaró un ministro a A24.com, "no se habló en la reunión de Gabinete".

Unos más maquiavélicos, sospechan de un visto bueno del jefe de Gabinete, Marcos Peña como una manera de evitar que el presidente electo, Alberto Fernández -que anunció que cuando asuma impulsará una ley de legalización del aborto- se quede con la bandera política de los "pañuelos verdes", los sectores sociales que defienden esa postura.

Llamativamente, el martes 19 por la tarde, el mismo día en que Rubinstein firmó las dos resoluciones que desataron la grieta en el oficialismo se lo vio al secretario de Salud ingresar a Casa Rosada por el Salón de los Bustos rumbo al sector donde están ubicados en el primer piso, los despachos de Macri y de Marcos Peña.