La causa es por presunta intimidación pública según el artículo 211 del Código Penal, que reprime “con prisión de dos a seis años, al que, para infundir un temor público o suscitar tumultos o desórdenes, hiciere señales, diere voces de alarma, amenazare con la comisión de un delito de peligro común, o empleare otros medios materiales normalmente idóneos para producir tales efectos.”
La denuncia señala que el temor público se habría corroborado a través del aumento de la cotización del dólar blue en forma “abrupta y en cortísimo plazo”, como consecuencia de las manifestaciones públicas de Milei. En el mismo documento describe que “el valor de dicha moneda extranjera para el mercado paralelo ascendió estrepitosamente y en menos de un día, desde los ochocientos setenta ($ 870) hasta los mil diez pesos ($ 1.010) –valores éstos aproximados y de referencia, claramente obtenidos de consultas web ya que no existe un mercado oficial de adquisición de moneda”.
Como indicio, la presentación tomó en cuenta cuando Javier Milei sostuvo “mirá, cuanto más alto esté el precio del dólar, dolarizar es más fácil”, por lo que le imputan “su voluntad e intención de obtener un resultado político económico determinado”.
A su vez, se citó una entrevista realizada por Eduardo Feinmann en Radio Mitre, en la que Milei recomendó que ante el eventual vencimiento de un plazo fijo en pesos “Jamás en pesos, jamás en pesos. El peso es la moneda que emite el político argentino, por ende no puede valer ni excremento, porque esas basuras no sirven ni para abono”.
En cuanto a Ramiro Marra, quedó involucrado por haber publicado en X (ex Twitter): «”Hoy más que nunca: NO AHORRES EN PESOS. Cuidá tu dinero, te costó mucho ganarlo”. Mientras que Agustín Romo publicó en la misma red social: “Los cínicos cómplices de los políticos te van a decir que no tenés que comprar dólares. Tenes que hacer todo lo contrario. Estos degenerados fiscales van a licuarte todo tu sueldo porque no les importa nada…”.
La defensa de Milei
Los abogados de Javier Milei; Francisco Oneto y Diego Spagnuolo, evalúan recusar al fiscal Picardi porque entienden que podría haber tomado una posición, antes de que se revise su pedido de excepción de falta de acción.
Lo cierto es que está corriendo el plazo para que la jueza Servini haga un apartado en el expediente contra Milei, con el propósito de analizar y responder el pedido de sobreseimiento por inexistencia de delito, que presentó la defensa del candidato de La Libertad Avanza.
El planteo de excepción de falta de acción se basa “en la jurisprudencia que ha aceptado que pueda procederse por esta vía cuando la inexistencia del delito sea evidente”.
Al mismo tiempo, afirma que Alberto Fernández intenta deshacerse de su responsabilidad como presidente, y “como manotazo de ahogado entre las tempestades marinas intenta que su color político tenga una posibilidad electoral”.
Sin eufemismos, la defensa de Milei le dijo a la justicia: “sabíamos que su gobierno era débil, pero no pensábamos que tanto”.
Para completar sus argumentos advirtió que “no es posible olvidar que al momento de ser intimado públicamente para que dé precisiones acerca de por qué motivo había hecho una fiesta de cumpleaños durante las restricciones de pandemia por él mismo decretadas, la culpa en aquella ocasión fue de “su querida Fabiola”.
En relación a la acusación de que Milei provocó el incremento del valor del dólar blue, sus abogados insistieron en que “de haber existido un peligro, creado por los dichos de nuestro prohijado, lo cierto es que tal peligro no es la consecuencia directa de dicha conducta, sino la consecuencia directa de que, el Presidente, paradójico denunciante en esta causa, asumió en 2019 con un dólar de $ 100, y hoy cuatro años después, se encuentra en ejercicio con un dólar de $ 1000".
Finalmente, aseguraron que “Aún pensando mal, nuestro prohijado afirma estas cosas con la intención de ganar las elecciones, no de infundir temor o provocar tumultos”.
La otras causas que enfrenta Milei
Javier Milei no sólo se enfrenta en el campo judicial con el gobierno nacional, sino que también fue denunciado por Patricia Bullrich. La candidata de Juntos por el Cambio, por un lado le inició una querella por calumnias e injurias tras haber dicho que ella era “una montonera tira bombas”, y por otro, lo acusó de provocar incitación al odio e intimidación pública. Las causas recayeron en el juzgado federal 9 que subroga Maria Eugenia Capuchetti, y en el 12, que subroga Ariel Lijo.
La reacción de los abogados de Milei fue la misma que en la denuncia de Alberto Fernández, por lo que presentaron pedidos de falta de acción ante ambos tribunales. En sus fundamentos indicaron que “la figura penal denunciada por Bullrich se encuentra cargada de una subjetiva considerable”, y remarcaron que “es claro que lo que busca la denunciante es criminalizar opiniones vertidas en el marco de una puja política”.
Patricia Bullrich acusó a Milei de mentir y excederse en el ejercicio de la libertad de expresión con el objeto de obtener una ventaja electoral. Remarcó que “no sólo nunca tuve intervención en algún hecho vinculado a la colocación de explosivos en jardines de infantes, sino que no se registra atentado alguno de tales características en la República Argentina”.
Las denuncias de Bullrich surgieron después de que Javier Milei aseguró en A24 que “era una montonera tira bombas, o sea, digamos, ha puesto bombas en jardines de infantes, eh digamos, participaba, era parte de una de una organización terrorista”.