Desde que el ministro de Salud de Quebec, Christian Dubé, comunicó que comenzarían a pedir el pasaporte sanitario para quienes quieran consumir alcohol o cannabis en sus tiendas, los turnos inocularse contra el coronavirus se cuadruplicaron. Y de vacunar a unas 1500 personas diarias el número saltó a 6000.
“Si los no vacunados están descontentos con esta situación, tienen una solución muy sencilla: vacunarse. Es gratis y protege contra la enfermedad”, enfatizó Dubé.
El ministro explicó también que el 50 por ciento de los ciudadanos internados con Covid-19 en los hospitales son no vacunados.
Fuente: Crónica