Paul Bishop, de 63 años, salió a tomar unas copas, pero rápidamente la noche se le fue de las manos y terminó alcoholizándose. Debido a la borrachera, el inglés vomitó en un contenedor de basura de gran tamaño y mientras regurgitaba perdió su dentadura postiza.
Bishop se sorprendió al recibir un paquete con su dentadura postiza, que finalmente fue encontrada en el vertedero en España. Las autoridades españolas pudieron rastrear el ADN del hombre, hallado en la prótesis, y se la enviaron al Gran Mánchester junto con una carta en la que le explicaban cómo la recuperaron.
Seguido a eso, la dentadura fue enviada a un almacén, ya que estaba clasificada como parte del cuerpo, y las autoridades españolas no permitieron su destrucción. Finalmente, unos meses atrás, un técnico de laboratorio se topó con el objeto y logró identificar a su propietario mediante el ADN.