No tires tus lapiceras. Usalas para esta hermosa idea que te dará muchos frutos en tu casa y jardín.
Las lapiceras son herramientas indispensables tanto en oficinas como en hogares. No obstante, su destino suele ser el basurero una vez que la tinta se agota. Sin embargo, esta situación puede cambiar con una ingeniosa idea de reciclaje "hazlo tú mismo" (DIY), que promete darles una segunda vida a estos objetos cotidianos.
Imagina un domingo por la tarde, el sol brillando en el jardín, y tú con un proyecto en mente: convertir esas viejas lapiceras en un regador casero y económico. Este artículo te guiará paso a paso en esta sencilla pero funcional manualidad, ideal para quienes buscan una alternativa sustentable y creativa.
Preparación de las lapiceras: Comienza reuniendo todas las lapiceras que ya no funcionan. Extrae la parte interna que contiene la tinta y retira el tapón del extremo. Te quedarás solo con el tubo externo, que será la pieza clave para tu nuevo regador.
Preparación de la botella: Toma una botella de plástico limpia y, con ayuda del cúter, haz una serie de agujeros en su superficie. El número de agujeros dependerá de la cantidad de lapiceras que tengas, y deben ser del mismo tamaño que el diámetro de las lapiceras para asegurar un buen encaje.
Ensamblaje del regador: Inserta las lapiceras en los agujeros de la botella. Si deseas mayor firmeza, aplica un poco de pegamento en las uniones y deja secar bien.
Adaptación de la manguera: Perfora la tapa de la botella, haciendo un orificio del tamaño de la manguera. Introduce la manguera en este agujero asegurándote de que quede bien ajustada.
Una vez ensamblado, solo necesitas conectar la manguera a una fuente de agua. Al abrir la canilla, el agua llenará la botella y saldrá a través de las lapiceras, distribuyendo el agua de manera uniforme sobre tu césped y plantas.
Beneficios del proyecto:
Este proyecto no solo es una excelente manera de reciclar materiales que de otro modo terminarían en la basura, sino que también ofrece una solución práctica y económica para el riego del jardín. Además, involucra a toda la familia en una actividad creativa que fomenta la conciencia ecológica.
Con esta propuesta DIY, transformarás lo ordinario en algo extraordinario, dándole nueva vida a objetos desechados y contribuyendo al cuidado del medio ambiente. Así que, la próxima vez que una lapicera se quede sin tinta, ya sabes qué hacer: ¡Recíclala y crea un práctico regador para tu jardín!