Se acerca el Día de Santa Rosa, y como siempre se prevé la llegada de las lluvias y la mítica tormenta; que este año, encima, vienen precedidas por una nueva ola de frío y que ya se pronostica cuándo podría pasar por Buenos Aires.
Agosto va llegando a su fin y todos están a la expectativa del arribo del famoso fenómeno relacionado con una fiesta religiosa. El Servicio Meteorológico Nacional ya anticipó cuando se aproximarían las lluvias y tormentas al AMBA.
Se acerca el Día de Santa Rosa, y como siempre se prevé la llegada de las lluvias y la mítica tormenta; que este año, encima, vienen precedidas por una nueva ola de frío y que ya se pronostica cuándo podría pasar por Buenos Aires.
Cada 30 de agosto se celebra el Día de Santa Rosa de Lima. Según la histórica leyenda, en el lapso que va del 25 de agosto al 4 de septiembre se espera la llegada de las lluvias y tormentas más fuertes de cada año.
Aunque este fenómeno no se manifiesta de manera regular todos los años, las condiciones atmosféricas actuales sugieren que en 2024 podría presentarse en varias regiones del país, generando lluvias y tormentas de diversa intensidad.
De acuerdo al pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), se espera que haya lluvias en el centro y en el norte del país durante el próximo fin de semana, entre el viernes 30 y el sábado 31 de agosto. Estas afectarán a la Ciudad de Buenos Aires y sus alrededores, además de las provincias de San Juan, San Luis, Mendoza, La Rioja, Catamarca, Tucumán, Corrientes, Entre Ríos y Santa Fe. De todos modos, aún no se lanzó ningún alerta al respecto.
Igualmente, para que sea considerada una “tormenta” tiene que haber actividad eléctrica. Una lluvia sin la presencia de descargas bruscas de electricidad atmosférica acompañadas por un resplandor (relámpago) y un ruido (trueno), no clasifica como tal.
Santa Rosa de Lima es una figura religiosa del siglo XVII que nació en Perú y todavía es recordada por un milagro que salvó a la ciudad de Lima de un ataque de piratas, según explica la tradición. La mujer se habría resguardado en el convento de Nuestra Señora del Rosario para rezar mientras avanzaban un grupo de corsarios holandeses.
El pedido fue escuchado y comenzó una tormenta de tal intensidad que no permitió el desembarco de los invasores, por lo que se convirtió la primera persona nacida en América que fue canonizada. Con el paso de los años, la tradición y leyenda se mantuvo, además de que muchas personas esperan con expectativa un diluvio en la fecha señalada.