Escondite estrafalario

El insólito lugar del cuerpo en el que un ladrón ocultó una millonaria joya inspirada en James Bond

Ni a Ian Fleming, el creador de James Bond, se le hubiese ocurrido una misión como esta. Un hombre se robó una joya usada en la película "Octopussy" y por el momento sigue detenido, ya que recuperarla es muy complejo. ¿Una tarea para 007?

Roberto Adrián Maidana
por Roberto Adrián Maidana |
Un extraño robo y un lugar insólito para esconder una joya. Un verdadero desafío para 007. (foto: A24.com)

Un extraño robo y un lugar insólito para esconder una joya. Un verdadero desafío para 007. (foto: A24.com)

Esta vez, la realidad, vuelve a superar a la mejor ficción de Ian Fleming, el creador de James Bond. Un insólito y delicado caso médico mantiene en vilo a un hospital europeo luego de que una persona fuera internada de urgencia tras haberse tragado "accidentalmente" una joya de Fabergé que había sido utilizada como utilería original en la película Octopussy, de la saga de James Bond.

Según informaron fuentes médicas, el paciente ingresó con fuertes dolores abdominales y dificultades para alimentarse. Tras los estudios correspondientes, los médicos descubrieron que en su aparato digestivo había un objeto metálico de tamaño considerable. La sorpresa llegó cuando los especialistas, junto a investigadores del caso, confirmaron que se trataba de una pieza ligada al histórico nombre de Fabergé, una casa famosa por sus joyas y huevos imperiales de la corona rusa,

El objeto habría sido adquirido recientemente en una colección privada dedicada al memorabilia cinematográfico. Por razones que aún se investigan, la persona terminó ingiriendo la pieza en circunstancias poco claras. ¿Un robo?

La joya en cuestión aparece "robada" a su vez por James Bond a un contrabandista de joyas. El papel de 007 lo interpretó Roger Moore. Ahora, el "poseedor" de la joya Fabergé sigue detenido, pero en una sala de cuidados especiales. Estudian cómo recuperar el "huevo" utilizado en esa película, junto con la "sorpresa" que llevan todos las obras del orfebre de los zares.

El paciente continúa bajo observación, estable pero con pronóstico reservado. El caso, por su mezcla de cine, lujo y medicina, no tardó en captar la atención internacional.

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James Bond: "Se quejaría, si fuese legítima..."

Octopussy (1983) fue la sexta película con el británico Roger Moore en la piel del agente 007, al servicio de su majestad. En el filme, Bond debe engañar a un millonario árabe, interpretado por Louis Jourdan, que compra en una subasta uno de los famosos huevos de Fabergé. Justamente, en su interior, la "sorpresa" es otra joya, un pulpo, que da nombre a la película. Bond consigue hacerse con la joya, suplantando la original con una copia perfecta. Cuando reporta que la misión está hecha. Bond (Moore) muestra el huevo de Fabergé ( con Octopussy, en su interior) a un asombrado jefe. Al preguntarle cuál será la reacción de Louis Jourdan (el millonario árabe), responde: "Se quejará, si fueslegítima...", dice James Bond con la típica flema británica. Sucede que la copia en manos de Jourdan es tan buena, que cuando descubra la maniobra del cambio, será tarde.

Aquí, hubo otra maniobra, mucho más compleja y peligrosa. Como para una eventual continuidad de "Octopussy" para el nuevo Bond, el sucesor de Daniel Craig.

bond y faberge
Roger Moore como "James Bond".Tiene en la mano la "joya" de Fabergé que se comió un fanático de la "memorabilia" de 007. (Foto: Captura de TV)

Roger Moore como "James Bond".Tiene en la mano la "joya" de Fabergé que se comió un fanático de la "memorabilia" de 007. (Foto: Captura de TV)

Un lugar estrafalario para esconder una joya

Para que no queden dudas sobre que el asunto es serio. No es una joya del orfebre de los zares. Pero es muy valiosa. Es apenas inferior a los 30.000 dólares que se pagaron por el original subastado hace pocos días. Las pelis de Bond, cotizan alto.

Como le ocurre al agente 007, es necesario recorrer el mundo para llegar a este caso de robo tan particular. Nos ubicamos en Auckland, la ciudad más importante de Nueva Zelanda. Un hombre llegó hasta allí siguiendo una "joya" de la "memorabilia" de los fanáticos de James Bond. Se trata de una pieza que se usó en la película que Moore protagonizó en 1983. Claro que imitaba a una original de Fabergé. "Octopussy" no era la sorpresa maravillosa de uno de sus huevos de Pascua, que Fabergé regalaba cada año a la madre y a la esposa del Zar Nicolás II de Rusia.

007 y la joya de Octopussy
La "joya" de Octopussy, vale casi tanto como real una subastada hace pocos días. (Foto: Gentileza 007 store)

La "joya" de Octopussy, vale casi tanto como real una subastada hace pocos días. (Foto: Gentileza 007 store)

Se hizo una "creación" para darle el objetivo central de la película con Roger Moore. Pero todo lo que se usa en el séptimo arte, especialmente de películas clásicas, recordadas, icónicas o integrantes de una saga, con el paso del tiempo cobran valor. Y mucho. Eso fue lo que sucedió con este huevo con el pulpo como sorpresa. Estaba a la venta en un local de Auckland. Un día apareció un hombre que se interesó en varias cosas y en un descuido del dueño, se tragó el collar de Fabergé (o de James Bond). Así de simple y peligroso al mismo tiempo. Hubo un momento de confusión ante la desaparición de esa pieza. El falso cliente logró zafar, pero poco más tarde, antes de poder "recuperar" lo que ya tenía su estómago, comenzó a sentirse mal, muy mal.

octopussy James Bond joya
El huevo y el pulpo, las "joyas" de Fabergé, utilizadas en una película de James Bond. Robadas por un fanático delirante. (Foto: Gentileza 007 Store)

El huevo y el pulpo, las "joyas" de Fabergé, utilizadas en una película de James Bond. Robadas por un fanático delirante. (Foto: Gentileza 007 Store)

Fue a un hospital y solo dijo que tenía un malestar, pero no por tragarse/robarse un elemento de un negocio de coleccionistas. El equipo médico se llevó una sorpresa al ver una ecografía. Vieron la causa de los males del hombre. El "huevo de Fabergé" estaba ahí. Con partes metálicas y puntiagudas que, en cualquier momento, le pueden producir una lesión gravísima en los tejidos.

Por eso, se lo dejó en observación permanente. Se evalúa ahora el riesgo que implica la extracción o como evitar que pueda dañar internamente el cuerpo del, por ahora, sospechoso de un robo. La opción más segura parece ser la de una intervención quirúrgica si el objeto no puede ser expulsado de manera natural.

Puede ser otro trabajo para James Bond. Solo que no debe usar su "licencia para matar" sino una "licencia para operar". Seguramente, el MI6 le puede conseguir una. Quien va a preguntar si es falsa.