Los padres de Pilar y Delfina, Andrés Hecker y Marina Haag, estuvieron hoy a orillas de la Ruta 3 acompañando el operativo de búsqueda que por el momento no dio resultados, en un terreno arcilloso y embarrado, con puentes caídos y con un panorama de angustia.
Los operativos están focalizados en las lagunas que se formaron tras la tormenta en el acceso a General Cerri, localidad situada a unos 15 kilómetros al sudoeste de Bahía Blanca. En esa misma zona, se halló el domingo el cuerpo de Rubén Zalazar, el chofer que murió al ser llevado por la corriente, tras intentar rescatar a las dos chicas que hoy siguen con paradero desconocido.
La búsqueda continúa con kayaks y a pie
Con las aguas más calmas, la búsqueda continúa con kayaks y a pie, paso a paso, con las piernas sumergidas hasta las rodillas, para tratar de alguna señal de las menores. También se utilizan drones de la policía, que rondan la zona capturando imágenes. Según se supo, el área de rastrillaje se va ampliando con el correr de las horas.
La camioneta de Zalazar, en la que fueron vistas por última vez las hermanas, fue encontrada por una avioneta el sábado pasado, entre la ruta 3 y General Cerri.
El intendente local, Federico Susbielles, fue pesimista respecto de la situación: “Hay una denuncia realizada y un registro visual que nos hace presumir, lamentablemente, un mal desenlace”. En tanto intensifican el rastrillaje en puntos específicos con el deseo de poder hallar a las pequeñas víctimas.