Las repercusiones fueron inmediatas. La revista So Foot desempolvó un perfil que había realizado en 2023 titulado “El portero que amamos odiar”, y lo reeditó en la previa del duelo ante el PSG. “Antes del Mundial era un desconocido. Luego disgustó a Francia, avergonzó al resto del mundo con sus celebraciones y provocó un baby boom en Argentina. En una sola competición, se convirtió en un bastardo para algunos y en un héroe para otros”, publicaron.
El ambiente previo al encuentro se tornó denso, y no faltaron los cruces. Désiré Doué, jugador del PSG, buscó bajarle el tono a la figura del argentino: “Es un arquero como cualquier otro. Aún no me he enfrentado a él. El objetivo será marcarle tantos goles como sea posible”.
Del lado inglés, Unai Emery, entrenador del Aston Villa, salió a respaldar a su arquero. “Él es maduro. Está progresando para contener sus emociones. Se ha vuelto un mejor jugador y un mejor arquero también”, destacó en conferencia. Además, pidió respeto hacia todos los protagonistas del duelo: “Espero que el partido se viva con respeto. Cada jugador y cada persona defiende una identidad, pero eso es el fútbol”.
Martínez, que en 2023 fue galardonado como el mejor arquero del mundo en París durante la gala del Balón de Oro, volverá a jugar en suelo francés con los flashes puestos en él. Y con la gorra albiceleste como bandera.