"La audaz jugada de Milei: normalizar la economía argentina"
Ese es el título de la publicación británica que marca el tipo de desafío en el que se encuentra el presidente argentino. Salir de décadas de atraso y regulaciones para colocar al país con las normas que sigue casi todo el mundo y entonces sí, comenzar una nueva oportunidad para la economía nacional.
Remarca el reciente apoyo del Fondo Monetario Internacional como espaldarazo para lo que realizó en sus primeros 15 meses de gestión. "Una gran cantidad de dinero del FMI ayudará a que el peso flote parcialmente, pero abundan los riesgos políticos y de mercado", dice el artículo pero, marca que la Argentina puede dejar su impronta: "En lugar de hablar de crecimiento al ritmo chino, el mundo pronto hablará de crecimiento al ritmo argentino", según dijo el presidente en su discurso del 11 de abril al anunciar la salida del cepo.
Los desafíos pendientes para los cambios que quiere Milei
The Economist apunta que su ministro de Economía acaba de presentar un programa de 20.000 millones de dólares del FMI, una reducción de los controles de capital y un cambio hacia un tipo de cambio más flexible. Y marca que la primera reacción en contra que tuvo fue una medida de fuerza. "El 10 de abril, poco después de conocerse la noticia del acuerdo con el FMI, una huelga general planificada contra los recortes de gastos del Sr. Milei paralizó el país", dice la nota.
Y hace una descripción -exagerada - que explica la foto que ilustra la nota: "El Aeropuerto Jorge Newbery de Buenos Aires, la capital, quedó vacío. Los trenes y el metro permanecieron en silencio. La basura sin recoger se pudría en las calles".
La nota hace una enumeración de los problemas graves que debió enfrentar el libertario cuando llegó a la Casa de Gobierno: “Heredó un gasto público desenfrenado, una inflación galopante y una maraña de controles de capital y tipos de cambio. Recortó el gasto de inmediato, reduciendo drásticamente la inflación. Una profunda recesión está dando paso a un fuerte crecimiento. La tasa de pobreza, que alcanzó el 53% de los argentinos a principios de 2024, ha retrocedido al 38%, un nivel inferior al que tenía cuando Milei asumió el cargo”.
¿Por qué esta vez puede ser distinto con Milei?
The Economist recuerda a sus lectores algo que los argentinos conocemos muy bien: “Muchos de los 22 programas anteriores del FMI con la Argentina terminaron en desastre”. Pero esta vez marca una diferencia por los propios antecedentes y características de Milei: “El historial de Javier Milei da cierta credibilidad a su insistencia en que esta vez será diferente”.
Aunque advierte que la situación internacional puede ser un problema:"Milei nunca ha estado tan cerca de transformar a la Argentina en una economía normal. Pero el caos económico mundial pone en peligro sus reformas, y la política aún podría hacerle tropezar”.
También explica una realidad que el gobierno (Milei y Caputo, especialmente) no tocan o presentan otra interpretación. Para The Economist, hubo una parte en esta primera parte de su gobierno que tuvo éxito pero con un daño colateral: con una serie de medidas -mantuvo los controles de capital y el tipo de cambio en una paridad móvil, lo que inicialmente devaluó el peso un 2% mensual frente al dólar- pudo contener la inflación y lograr un marcado descenso. Como contrapartida, sobrevaluó el peso.
Esta situación hizo que con el paso del tiempo, el Banco Central comenzara a perder reservas y, por lo tanto, debió recurrir a un nuevo préstamo con el FMI para poder ir a una banda cambiaria para el dólar. Para el 11 de abril, sus reservas de divisas estaban en números rojos por unos US$7.000 millones", remarca The Economist.
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Scott Bessent, secretario del Tesoro de EE.UU. estuvo con Milei en la Rosada. (Foto: Gentileza La política online)
The Economist: "Milei actuó"
Con esa definición, la nota describe lo que fue el golpe de timón anunciado el viernes pasado y que comenzó este lunes. Selló un nuevo acuerdo con el FMI por US$20.000 millones, para iniciar un régimen cambiario más flexible. Define a esta estrategia como “valiente porque es arriesgada” al comenzar una etapa de flotación de la divisa y enfrentar las demandas del mercado. Camino a una sociedad financiera normal. Pese a los temores por lo "desconocido" durante años por la Argentina, The Economist dice que “las primeras señales son positivas”.
"El riesgo para Milei es que estas reformas radicales provoquen inflación, y esta, una situación política delicada", señala la publicación ante el recalentamiento de la inflación. Al mismo tiempo, apunta un objetivo más inmediato para el gobierno: "El Presidente espera que cualquier aumento dure solo unos meses y termine antes de las elecciones intermedias de octubre".
Trump, un aliado muy particular
El impacto de los aranceles impuestos -con sus idas y venidas - del presidente de Estados Unidos, también afectan a la economía argentina y los planes de Milei."Siente una gran simpatía por Trump, pero su guerra comercial provocó una fuerte caída del precio del petróleo y amenaza el precio de los productos agrícolas", apunta The Economist y eso provoca que los inversores que desconfían de Argentina, un país que incumple constantemente sus obligaciones", recuerda la nota.
Sin embargo, apunta como de gran significación lo que acaba de suceder este lunes con la visita del secretario del Teroso, Scott Bessent, aunque “no se anunció nada concreto”.
También enumera los riesgos que enfrenta Milei en este año electoral. La caída de la inflación es la base de su popularidad, pero si regresa, todo se puede complicar porque reavivará los reclamos sociales. También anota la situación fallida con Lijo y García Mansilla y el “escándalo de las criptomonedas que socava su narrativa sobre la lucha contra la ‘casta’ corrupta”, según The Economist. El otro tema de estricta actualidad política es la orfandad del presidente Milei que no tiene mucha representación en las provincias o en el Congreso. La relación con Mauricio Macri es clave para The Economist, pero no deja de destacar los constantes cortocircuitos entre ambos líderes y ambos partidos.
En el final, el artículo plantea esta encrucijada:"Nunca estuvo tan cerca de convertir a Argentina en una economía normal. Pero el caos económico global amenaza sus reformas, y la política aún puede jugarle en contra" y cierra: “El camino por delante sigue siendo difícil, pero por ahora, sorprendentemente, Milei parece tener más probabilidades de lograr su transformación de la economía argentina”.