En un intento por contener una inflación sin freno, el Gobierno insiste en la creación de una canasta de proximidad que acordará con comercios de cercanía, pero existe un factor que aún queda acompañado por un signo de interrogación: ¿qué pasará con las frutas y verduras, que fueron el ítem con mayor incidencia dentro de la suba de los precios de los últimos meses?