La inflación de julio fue de 4%, la más baja en todo el gobierno de Milei. (Foto: pexels)
El 2022 terminó con una inflación del 95,5% y se alejó de las proyecciones que aseguraban una tasa acumulada del 100% para los 12 meses del año. Así lo pronosticaron los llamados "gurús" de la City porteña que releva el Banco Central todos los meses, quienes previeron un 5,5% para diciembre y así, confirmaron que la desaceleración de los precios terminó.
Se trata de una corrección a la baja de 3,5 puntos porcentuales para la medición año a año por debajo del pronóstico de la encuesta previa del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) en la que participan analistas y consultoras, siendo la primera vez, en nueve meses, que la tasa de inflación interanual esperada por los analistas para diciembre de cada año presenta una baja.
Con el dato del último mes 4,9% que marcó el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de noviembre y dio un respiro a los aumentos que apretaron fuerte los bolsillos durante el año que acaba de finalizar, quedó atrás y se espera que el nivel de precios vuelva al camino ascendente.
Tal es así, que las proyecciones para el 2023 apuntan a un 98,4% interanual, y aunque se trata de 1,3 puntos porcentuales menos, se aleja del objetivo oficial de bajar la inflación y hacer crecer los salarios de los trabajadores.
Incluso enero ya comenzó con subas que tienen un alto impacto en el poder adquisitivo: 40% en el transporte público, quita de subsidios del agua en AMBA, Internet, telefonía móvil y TV paga, 4% en combustibles a partir del 16 de este mes y además, subas en el pago del monotributo.
Durante el 2022, Argentina entró en un régimen de alta inflación tras alcanzar una combinación de variables que generan una volatilidad mayor en la dinámica de los precios, un efecto más sensible a cualquier comportamiento de la economía.
Es decir, que deja de ser importante qué tanto suben los precios para que la variable de análisis sea qué tan rápido se mueven.
Esta tendencia continuará durante 2023 y en la previa del calendario electoral, la volatilidad que impera en los mercados, la dudas sobre la sostenibilidad de la deuda en pesos, el elevado nivel de asistencia monetaria al Tesoro por parte del BCRA y la imposibilidad de reducir la brecha fiscal, son frentes abiertos que deberá atender en lo inmediato el equipo económico a cargo de Sergio Massa.
Además, hacia el 2024 la variación interanual de inflación estimada se mantuvo en 75%, y para el 2025 un nivel de inflación anual del 51,1%.
